MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

Científicos argentinos satisfechos con el año de las energías renovables

En el año de las energías renovables, Científicos del CONICET que participan en investigaciones e iniciativas vinculadas al desarrollo de energías limpias, se pronunciaron a favor de la necesidad de impulsar la búsqueda de comenzar a modificar una matriz energética aún demasiado dependiente de fuentes no renovables.

Ernesto Calvo, investigador superior del CONICET y director del Instituto de Química, Física de los Materiales, Medioambiente y Energía, que trabaja en el desarrollo de baterías de litio-aire para vehículos eléctricos, opinó: “En América del Sur, la producción y almacenamiento de energías renovables constituye una posibilidad para llevar la electricidad a las 30 millones de personas en esta región que hoy carecen de ella por habitar zonas remotas. Una parte de la electrificación rural remota puede cubrirse con paneles solares y almacenarse en acumuladores eléctricos, como las baterías de litio que nosotros desarrollamos”.

Por su parte, Fabiana Gennari, investigadora principal del CONICET en el Centro Atómico Bariloche de la Comisión Nacional de Energía Atómica, expresó: “Cumplir el compromiso asumido por Argentina de aumentar a un 20 por ciento la contribución de las energías alternativas para el 2025, implica promover el empleo de energías limpias que hoy son desaprovechadas. La naturaleza intermitente de alguna de estas fuentes ha retrasado su implementación; el hidrógeno como vector energético resulta una alternativa a este inconveniente. Es necesario reflexionar sobre cómo consumir de una forma más eficiente y cómo reducir o eliminar la emisión de gases responsables del efecto invernadero”.

Por último, Eugenio Otal, quien participó en el desarrollo de un fotocatalizador de alta eficiencia que se apunta a que pueda servir para obtener hidrógeno a partir de rompimiento de moléculas de agua, manifestó que “las energías alternativas plantean un sistema de producción sustentable y deslocalizado, el sol brilla y el viento sopla en todo el planeta, cada país puede tener su propio desarrollo energético, independientemente del entorno geopolítico y sus recursos. Es una excelente iniciativa en el momento de madurez de la sociedad para adoptar el cambio”.

 

Fuente Conicet Mar del Plata