MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

Cómo funciona la Resistencia Ancestral Mapuche, la organización que preocupa al Gobierno

Chubut.-Periodismo para todos viajó hasta Chubut para hablar con damnificados que fueron atacados por el violento grupo.

Un conflicto amenaza a la Patagonia. Se extiende por las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut. Avanza desde el otro lado de la cordillera, desde Chile, y la semana pasada llegó a Buenos Aires. Se trata de los ataques de la Resistencia Ancestral Mapuche (R.A.M.), un grupo radicalizado que cree en la lucha armada como medio para reclamar por las tierras. Periodismo Para Todos sintetizó la manera en la que funciona esta organización que preocupa al Gobierno.

El RAM pretende levantar una nación mapuche entre los estados argentino y chileno, ya que no se consideran parte de ninguno de los dos países. En los últimos meses ejecutaron varios ataques. Uno se dio en la ruta 40, donde una de sus primeras víctimas fue Luis Rastrelini, un chofer al que encapuchados de este grupo le incendió el camión.

«Venía transitando por este camino y a la altura de Esquel, me sorprendió una barricada de piedra. Me tiraron una bomba molotov y tuve que parar. Tres personas armadas me apuntaron, dijeron que eran de las RAM, me tiran un bidón con nafta adentro del camión. Uno me pegó con la culata del revólver», recordó el conductor a PPT.

En Bariloche los objetivos del grupo fueron los refugios de alta montaña del Club Andino: primero quemaron el Neumeyer y, luego, incendiaron el refugio Jakob en la zona de Laguna Negra. En los lugares dejaron pancartas con un pedido de libertad del líder del grupo, Jones Huala, que está detenido. En esos carteles también dibujaron su logo: un escudo mapuche y un fusil que representa la lucha armada.

Más al sur, en Chubut, los ataques del R.A.M. tienen como objetivo las estancias pertenecientes a la familia Benetton. Las veces que actuaron, torturaron a los serenos de las estancias para robarles sus armas y, después, les incendiaron los puestos. Evaristo Jones, uno de los serenos que protegía un puesto, relató la manera en la que parte del grupo de mapuches lo atacó. «Estaba a la noche en el puesto. Me desperté por los perros. Salí y vi que alguien pasaba con una luz. Me tiran con puerta abajo. Estaban todos encapuchados. Dos me atacaron. Me ataron las manos. Me dijeron que ellos no tenían nada en contra mío, sino con la estancia donde trabajaba. Me quemaron hasta la ropa», comentó.

Los ataques crecieron en los últimos tiempos. Como el que ejecutaron contra Jones, hay decenas. En 2012 hubo un episodio dudoso en Neuquén, como el asesinato del policía José Aigo. El oficial detuvo una camioneta que se trasladaba desde Junín de los Andes hacia Aluminé. Por investigarla fue asesinado al costado de la ruta.

El asesinato de Aigo se lo adjudicaron dos grupos armados chilenos: el Frente Patriótico Manuel Rodríguez  y el MIR, Ejército Guerrillero de los Pobres. Para la justicia de San Martín de los Andes, esas organizaciones están relacionadas con el R.A.M. Los hermanos de Aigo formaron parte activa de la investigación e incluso de la búsqueda de los prófugos acusados del crimen. Para ellos, el fantasma del narcotráfico está presente. «En los bolsos llevarían droga, armamento o dinero», confirmó el fiscal de San Martín de los Andes, Fernando Rubio, que investiga la causa.

Pero detrás de toda esta organización hay una persona que es uno de los líderes. Facundo Jones Huala, hoy preso en el penal federal de Esquel, provincia de Chubut, le dijo a PPT que está dispuesto a «resistir a sangre y fuego». «Hay cosas que no puedo ocultar como mi afiliación política e ideológica. Nosotros validamos la violencia política como arma de autodefensa. Planteamos la liberación mapuche como la reconstrucción de nuestro mundo. Somos como un brazo armado de un movimiento mapuche: usamos molotov, cuchillos, palos. Más de eso, no podemos», sostuvo.

Una semana después de esta entrevista incendiaron la estación Bruno Tomae de La trochita, cerca de El Maitén. Después hubo un corte de ruta, donde intervino la Gendarmería. Allí, desapareció Santiago Maldonado, un joven que militaba con la organización. A partir de ese instante, manifestantes ligados al grupo actuaron en Buenos Aires: irrumpieron en la Casa de Chubut, donde vandalizaron la oficina con diversos grafitis, rompieron vidrios y destrozaron muebles. Todo a pocos metros de la Casa Rosada.

Fuente: http://tn.com.ar/politica/como-funciona-la-resistencia-ancestral-mapuche-la-organizacion-que-preocupa-al-gobierno_811403