MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

El desarrollo del Conicet Patagonia Norte, es una muestra de trabajo integrado entre ciencia y comunidad

San Carlos de Bariloche.-El Centro Científico Tecnológico (CCT) Conicet Patagonia Norte, que está poniendo en marcha un nuevo edificio en Bariloche que demandó una inversión de más de 8 millones de pesos, refleja con su desarrollo y crecimiento de la última década la apuesta del país a la ciencia y tecnología al servicio de la comunidad.

Desde los años ’70 hubo becarios e investigadores de Conicet en la región, inicialmente en Río Negro y Neuquén, con un trabajo trascendente, que las nuevas políticas nacionales de Estado comenzaron reforzando y reorganizando, para luego incrementar y estimular el vínculo entre las investigaciones y desarrollos y la producción en toda su escala.

En este proceso, el Conicet creó numerosos institutos en todo el país hasta superar los 200, repartidos en 14 CCTs, y año a año incrementa su dotación de becarios e investigadores.

El CCT Conicet Patagonia Norte, que sumó a su área de desempeño la zona cordillerana de Chubut, es uno de los más grandes y nutridos del país: cuenta con 350 investigadores, 260 becarios, 14 profesionales de apoyo y 20 administrativos, repartidos en cuatro institutos, con un prolífico trabajo de vinculación tecnológica.

Su flamante director, el investigador y docente universitario Víctor Cussac, destacó en diálogo con Télam ese último punto como clave en el proceso de transformación y crecimiento del Conicet: “Es una orientación que comienza claramente en 2003 y que apunta esencialmente a devolver a la comunidad los fondos recibidos por el sector científico y tecnológico, que además crecieron mucho en este tiempo”.

La tarea de vinculación tecnológica con la producción tuvo en Bariloche y la región un fuerte impacto en las áreas más diversas.
Cussac resaltó el trabajo de creación del clúster cervecero artesanal, que de acuerdo a informaciones del sector aglutina a una quincena de pequeñas empresas y da trabajo directo a 500 familias, y se ubicó a la vanguardia en el país.

“Ese es un trabajo más reciente, pero también tuvo mucho impacto la tarea en los valles de Río Negro y Neuquén con el sector vitivinícola; la reubicación del basural municipal de Aluminé, y desarrollos con la fibra de guanaco en el norte neuquino”, enumeró el científico y directivo, entre un total de cientos de proyectos exitosos en marcha.

Agregó la asistencia a forestaciones de álamos, y el trabajo conjunto con la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) en la producción de truchas en el lago de la represa Alicurá, este último en el marco de uno de los desarrollos fuertes e históricos del Conicet en la región, a través de su Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medio Ambiente (INIBIOMA), asociado a la Universidad Nacional del Comahue.

También subrayó la labor asociada con la Universidad Nacional de Río Negro en el Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio (IIDyPCa), orientado a investigaciones y desarrollos antropológicos y sociológicos; y valoró el trabajo del geólogo Gustavo Villarosa (INIBIOMA) sobre la erupción de los volcanes Chaitén (2008) y Puyehue (2011).

Asimismo destacó el prestigio del Grupo de Física Forense del Instituto Balseiro, que conduce Guillermo Pregliasco, convocado por la justicia rionegrina, la federal y la de otras provincias para realizar las pericias más complejas y de casos muy controvertidos.

Los otros dos institutos de la región son el ProBien (en Neuquén) y el Centro de Investigaciones Esquel de Montaña y Estepa (CIEMEP), asociado con la Universidad Nacional Patagónica San Juan Bosco.

Además de las universidades, el Conicet tiene numerosos investigadores y becarios en el Centro Atómico Bariloche, el INTA, Parques Nacionales, la empresa Invap y otras entidades de la ciudad.

El CCT Conicet Patagonia Norte dio un salto trascendente en ambiente de trabajo y visibilidad con la compra y acondicionamiento de su nuevo edificio en la avenida Pioneros de Bariloche, que ya aloja a las áreas administrativas y de vinculación tecnológica, y ultiman detalles para inaugurar dos salones de conferencias y eventos, y otros espacios.

El edificio cuenta con más de 900 metros cuadrados cubiertos, dispuestos en cuatro pisos, diez oficinas, una sala de videoconferencias y reuniones, y una sala de capacitación, un ascensor y rampas de accesibilidad, y estacionamiento para 25 vehículos, entre otros espacios.

“Todo esto, el crecimiento del trabajo con la sociedad y el edificio, tienen que ver con la recuperación y fortalecimiento de la institucionalidad, un momento diametralmente opuesto a aquel en el que nos mandaron a lavar los platos”, expresó Cussac.

Fuente: TELAM