EN EL MARCO DE LA CELEBRACIÓN DEL DÍA DE LA ANTÁRTIDA EL PRÓXIMO 22: La historia respalda a Tierra del Fuego como puerta de entrada a la Antártida
Tierra del Fuego.-Por la cercanía geográfica, el interés argentino en la Antártida y la capacidad de apoyo a las ciencias, a principios de siglo se instaló un
Observatorio Magnético y Meteorológico en la Isla Observatorio, el 1 de marzo de 1902. Fue orden del entonces presidente Julio A. Roca, quien instruyó a la Armada para que realice dicha instalación. Desde entonces, nuestra provincia se posicionó como un punto estratégico en el estudio del continente blanco.
Hacia fines del siglo XIX, en 1899, el Teniente de la Armada Horacio Ballvé presentó en el Ministerio de Marina un proyecto para la construcción de un Observatorio Magnético en Isla de los Estados, esta presentación le dio a Ballvé la posibilidad de cursar estudios para su especialización en Francia.
Paralelamente, ese mismo año se realizó el VII Congreso Internacional de Geografía en Alemania, donde se discutieron los resultados del Primer Año Polar Internacional; en ese evento fue acordado entre los participantes, desarrollar un plan de expediciones a La Antártida.
Argentina, fue invitada a participar en dicha empresa internacional mediante la instalación de una base de apoyo. El sustento de la invitación tuvo tres razones: la cercanía geográfica, el interés argentino en la Antártida y la capacidad de apoyo a las ciencias.
En base a la política exterior seguida por el gobierno argentino, el Presidente Julio A. Roca en el año 1900 resolvió brindar la colaboración solicitada; para ello encomendó a La Armada Argentina la ejecución de la tarea para instalar el «Observatorio Magnético y Meteorológico» en la isla más oriental del grupo Año Nuevo, ubicada al Norte de Isla de Los Estados. Este grupo de Islas era denominado «Malvinitas» por Luis Vernet, primer comandante Político y Militar de la Comandancia de Malvinas, cuando las relevó cartográficamente.
Fue responsable de la construcción e instalación el Teniente Horacio Ballvé, asignándosele el buque ARA Azopardo.
El Observatorio inició su actividad el 1 de marzo de 1902; el primer buque en pasar fue el Antarctic de la expedición científica sueca en camino a la Antártida y entre los integrantes de esa expedición se encontraba el primer argentino que invernaría en el continente blanco, José María Sobral.
Los trabajos que realizaron en el Observatorio para servicio de las embarcaciones consistió en calibrar sus compases o registrar algún error de estos. De allí partían a La Antártida, no teniendo más comunicación hasta su regreso.
En la región del Estrecho Le Maire, fue construido el Faro de San Juan de Salvamento – conocido como Faro del Fin del Mundo- ubicado en el noreste de la isla de Los Estados, construido por la expedición de Augusto Lasserre en 1884. Desde un comienzo presentó dificultades a los navegantes por la poca visibilidad, por ello fue recomendado en su momento la construcción de otro Faro en el Grupo de Islas Año Nuevo.
Aprovechando la instalación de los Observatorios, se levantó el Faro Año Nuevo comenzando a funcionar el 1 de octubre de 1902.
El Observatorio Magnético y Meteorológico funcionó hasta fines de 1917, por su parte el Faro Año Nuevo continúa funcionando de manera automática hasta el presente. De esta Manera Tierra del Fuego comenzaba a ser la puerta a La Antártida.
Paralelamente, ese mismo año se realizó el VII Congreso Internacional de Geografía en Alemania, donde se discutieron los resultados del Primer Año Polar Internacional; en ese evento fue acordado entre los participantes, desarrollar un plan de expediciones a La Antártida.
Argentina, fue invitada a participar en dicha empresa internacional mediante la instalación de una base de apoyo. El sustento de la invitación tuvo tres razones: la cercanía geográfica, el interés argentino en la Antártida y la capacidad de apoyo a las ciencias.
En base a la política exterior seguida por el gobierno argentino, el Presidente Julio A. Roca en el año 1900 resolvió brindar la colaboración solicitada; para ello encomendó a La Armada Argentina la ejecución de la tarea para instalar el «Observatorio Magnético y Meteorológico» en la isla más oriental del grupo Año Nuevo, ubicada al Norte de Isla de Los Estados. Este grupo de Islas era denominado «Malvinitas» por Luis Vernet, primer comandante Político y Militar de la Comandancia de Malvinas, cuando las relevó cartográficamente.
Fue responsable de la construcción e instalación el Teniente Horacio Ballvé, asignándosele el buque ARA Azopardo.
El Observatorio inició su actividad el 1 de marzo de 1902; el primer buque en pasar fue el Antarctic de la expedición científica sueca en camino a la Antártida y entre los integrantes de esa expedición se encontraba el primer argentino que invernaría en el continente blanco, José María Sobral.
Los trabajos que realizaron en el Observatorio para servicio de las embarcaciones consistió en calibrar sus compases o registrar algún error de estos. De allí partían a La Antártida, no teniendo más comunicación hasta su regreso.
En la región del Estrecho Le Maire, fue construido el Faro de San Juan de Salvamento – conocido como Faro del Fin del Mundo- ubicado en el noreste de la isla de Los Estados, construido por la expedición de Augusto Lasserre en 1884. Desde un comienzo presentó dificultades a los navegantes por la poca visibilidad, por ello fue recomendado en su momento la construcción de otro Faro en el Grupo de Islas Año Nuevo.
Aprovechando la instalación de los Observatorios, se levantó el Faro Año Nuevo comenzando a funcionar el 1 de octubre de 1902.
El Observatorio Magnético y Meteorológico funcionó hasta fines de 1917, por su parte el Faro Año Nuevo continúa funcionando de manera automática hasta el presente. De esta Manera Tierra del Fuego comenzaba a ser la puerta a La Antártida.
Fuente: El Diario del Fin del Mundo
