Hidrógeno para el transporte

Buenos Aires (UNSAM). El ITBA y Mercedes-Benz firmaron un acuerdo de cooperación para desarrollar un ómnibus híbrido que se impulsará mediante hidrógeno y electricidad, con un bajo costo de mantenimiento.

Agencia TSS – Las principales marcas de automóviles de mundo ya cuentan con desarrollos de vehículos que utilizan fuentes de energía menos contaminantes. Sin embargo, ninguno de los desarrollos conocidos hasta el momento está trabajando en el diseño de un bus híbrido de hidrógeno y electricidad como el que esperan desarrollar los investigadores del Instituto Tecnológico Buenos Aires (ITBA), para el cual ya cuentan con el apoyo de la automotriz Mercedes-Benz.

Cecilia Smoglie, directora del área de Energía del ITBA, tiene a cargo este proyecto que busca desarrollar un vehículo que se adapte a las necesidades de países como los de América Latina, no sólo porque su costo sería un tercio menor que el de los desarrollos similares conocidos hasta el momento, sino también porque su mantenimiento resultaría menos sofisticado.

“La ventaja es que tendrá una ingeniería de mantenimiento más sencilla que la de los que existen actualmente, que usan celdas, porque para mantenerlas se necesita una infraestructura que no tiene América Latina”, explica Smoglie y agrega que el prototipo -que esperan tener listo en los próximos tres años- utilizará hidrógeno para alimentar un generador eléctrico a bordo, con el cual proveerán energía al motor que movilizará el vehículo.

El Instituto Tecnológico de Buenos Aires recibió un chasis de bus donado por la empresa Mercedes-Benz Argentina,
que será utilizado en el proyecto Bus Híbrido Hidrógeno – Eléctrico.

Actualmente, el motor del chasis que Mercedes-Benz donó para este desarrollo funciona con gasoil. Lo que los investigadores del ITBA harán será convertir ese motor para que funcione como generador de electricidad y para ello utilizarán hidrógeno. “Al principio vamos a convertir el motor a GNC (gas natural comprimido). En una segunda etapa buscaremos mezclar el GNC con hidrógeno, de manera progresiva, hasta que tengamos la tecnología y la experiencia necesaria como para cargar solamente hidrógeno”, detalla esta licenciada en física con un doctorado en ingeniería mecánica.

El generador eléctrico a desarrollar reemplazaría a las celdas combustibles que se emplean en los modelos actuales que utilizan hidrógeno, que en su interior tienen placas de platino –un recurso no renovable- donde el hidrógeno gaseoso se convierte en electricidad o viceversa. “Vamos a desarrollar el nuevo motor generador de electricidad, el sistema de baterías para cargar las baterías del ómnibus y el sistema de transmisión eléctrico que se alimentará con las baterías, con la ventaja de que cada vez que arranque y acelere consumirá electricidad, pero cuando frene recuperará energía de frenado y volverá a cargar las baterías, aunque en un porcentaje menor al que había empleado para acelerar”, destaca la especialista y agrega que, del mismo modo, para producir el hidrógeno que se utilizará en el prototipo recurrirán a plantas de hidrólisis con fuentes de energía renovable, específicamente eólica y solar.

“Este proyecto es una integración de tecnologías que se vienen desarrollando en el ITBA desde hace 15 años”, destaca Smoglie y apunta que se llevará adelante sumando conocimientos de distintas disciplinas en las que ya están trabajando: “Comenzamos a ganar experiencia en producción y almacenamiento de hidrógeno de alta presión, en la conversión de motores diesel a gas natural comprimido y mezclas de GNC con hidrógeno. También hemos trabajado en la optimización de aerogeneradores y el departamento de Electrónica está haciendo una plataforma experimental, a escala de laboratorio, de tecnologías de control de energía, conocidas como smart grids” ejemplifica.

Cecilia Smoglie, directora del área de Energía del ITBA, a cargo del proyecto que busca desarrollar un ómnibus híbrido
que se adapte a las necesidades regionales.

La elección de un autobús en vez de un automóvil se debe a que los investigadores están pensando en un concepto de ciudad sustentable en la cual el trasporte público tiene un rol importante que cumplir, aunque el principal objetivo del ITBA es, según aclara Smoglie, “aprender sobre tecnologías que permitan reemplazar los hidrocarburos por hidrógeno como combustible, sin usar celdas”.

Del mismo modo, la especialista sostiene que aunque la comercialización no es función del ITBA –los derechos los tiene Mercedes-Benz-, esta iniciativa buscará desarrollar un prototipo con posibilidades de ser comercializado, aunque por el momento haya que seguir esperando: “Este proyecto tiene un fuerte potencial de pasar al mercado, pero tendremos que superar errores, inconvenientes y vicisitudes”, advierte Smoglie.

Vanina Lombardi