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Neuquén: El Municipio sale a la caza de los vecinos que arrojan basura en cualquier lado

NEUQUÉN.- Cansados de una historia que se repite, el Municipio anunció que será implacable con los vecinos mugrientos que arrojen sus residuos en cualquier lugar de la ciudad. Los inspectores saldrán a las calles, harán operativos sorpresa y no habrá advertencias. Al que tire basura en un espacio público se le labrará una multa.

La decisión ya está en marcha, y los inspectores de Servicios Urbanos y también de Medio Ambiente visitarán no sólo los espacios identificados donde habitualmente se arrojan residuos, sino que lo harán por toda la ciudad.

Cristian Haspert, subsecretario de Limpieza Urbana, contó que es constante el arrojo de basura y relató que en diciembre limpiaron por completo tres basurales clandestinos y llenaron 80 camiones con desechos domiciliarios. «Hace 15 días atrás terminamos con la misma limpieza, y llegamos a completar 126 camiones», dijo el funcionario, quien señaló los basurales de Casimiro Gómez y Jenko, el de Huilen y Novella y el de Figueroa al fondo como los más conflictivos de la ciudad. «Pareciera que tuviesen un cartel que diga que está permitido tirar basura», ironizó Haspert.

Haspert contó que se pensó en dos maneras de ser rigurosos con los vecinos mugrientos: una, a través de los recorridos sorpresa que ya comenzaron, y la otra, con operativos barriales. «Vamos a plantear limpiezas por barrios y pedir a todos que tiren en la puerta de las casas todo lo que no les sirve para que el Municipio levante. Cuando termine este operativo, que será de diez días, va a pasar el inspector y, si encuentra basura en algún frente, se multará al vecino que tuvo tiempo para limpiar y no lo hizo», explicó el funcionario, y dijo que en este momento comenzaron con este procedimiento en la toma 7 de Mayo, Cuenca XV y Z1.

«Sabemos que en esto tenemos un problema y queremos ser implacables», dijo y agregó que se dieron situaciones impensadas durante los operativos de limpieza que se llevan adelante: «Por ejemplo, en Beltrán y Gatica limpiamos, y a los 20 minutos ya estaba sucio. Nos llamó una vecina para avisarnos».

El funcionario municipal contó que reciben a través de las redes sociales unas cien denuncias por día con relatos que denuncian situaciones de este tipo: «También les pedimos a los vecinos que nos ayuden y denuncien, pero para que nosotros podamos hacer la multa necesitamos la foto del auto en infracción con la patente visible», dijo Haspert.

Adelantó además que la idea es generar multas más altas para desalentar a los infractores que no tienen piedad sobre el espacio público. «Nos pasó, por ejemplo, que terminamos de limpiar, el director del área se quedó inspeccionando y se encontró con un vecino que llegó en la camioneta a tirar basura de su comercio. Lo advirtió y no le importó, lo filmó y el señor lo amenazó. Ahora ya se inició el proceso para la multa, con la filmación como sustento porque el director municipal no puede multar», cerró.

Es la multa máxima que se piensa para aplicar a los infractores. Aún el proyecto se está elaborando. Y este monto sería el máximo pensado desde la subsecretaría, pero aún debe discutirse en el Concejo Deliberante.

El subsecretario de Limpieza Urbana, Cristian Haspert, contó que está pensando en la posibilidad de generar un centro de transferencia en el predio de Servicios Urbanos del Municipio en Bahía Blanca y Richieri, con el objetivo de brindar a los ciudadanos un lugar más para tirar sus residuos voluminosos y evitar que se acumulen en basureros clandestinos, como ocurre en muchos barrios de la ciudad de Neuquén.

El funcionario indicó que actualmente los vecinos tienen la opción de transportar sus residuos voluminosos al centro de disposición final de Cliba en la meseta. «Pueden, por ejemplo, llevar un termotanque y dejarlo, que no le van a cobrar el ingreso. Sin embargo nadie lo hace», dijo Haspert.

Ante esta realidad, la idea que está en carpeta es hacer un pequeño centro de transferencia con cuatro contenedores grandes para que los vecinos tiren todo ahí. «Estamos pensando en ponerle rampas y lo que se necesite para que arrojen sus residuos y de ahí nosotros lo llevamos a la meseta», comentó el funcionario, quien aclaró que a este pequeño centro podrán ir escombros, carcasas de lavarropas y todo tipo de desecho voluminoso, pero aclaró que tendrá que ser el vecino el que se acerque al lugar.
Haspert contó que también podrán deshacerse de los desechos de poda que en esta época del año empiezan a verse por todos lados.

Fuente: Andrea De Pascalis para La Mañana de Neuquén