MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

Ultiman documental sobre el Abrazo al Limay

Bariloche – El 8 de octubre de 1995, más de cinco mil vecinos de Bariloche y la región le dijeron que no al proyecto de levantar una represa sobre el río Limay. A casi dos décadas del suceso, una película se propone poner coto al olvido.

Hay episodios que enaltecen la trayectoria de un pueblo. En Bariloche no podemos jactarnos de muchas cosas, pero sí de una en particular: el tremendo No que debió escucharse hasta en Buenos Aires, cuando el 8 de octubre de 1995 más de cinco mil vecinos abrazaron su río. Esa contundencia hizo que el gobierno nacional desechara el proyecto de construir una represa sobre el único tramo del Limay que quedaba sano. Y que todavía así permanece gracias a la enérgica defensa que se exteriorizó en sus orillas.

A punto de cumplirse dos décadas del episodio, un documental se apresta a ejercitar la memoria. Es un trabajo de Carlos Daniel Videla Dorna, cuyo estreno se previó para el próximo 6 de octubre a las 20, en la sala de la Biblioteca Sarmiento. El realizador debutante formó parte del colectivo que canalizó la oposición barilochense y con acierto, pensó que tamaña gesta no merecía naufragar en las siempre prestas aguas del olvido. “Todos los 8 de octubre a partir de 1995 nos hemos reunido en la costa del Limay para recordar aquel evento tan importante de la ciudad y también de Llanquín, Dina Huapi y Villa La Angostura. En 2011 se me ocurrió la idea de que tenía que estar fijado en la historia de los pueblos para que no se perdiera en los oscuros túneles del tiempo y la mejor manera era hacer un documental”.

Restaurador de muebles en su vida económica cotidiana, Videla Dorna pensó que “había información y elementos como para hacerlo, así que nos pusimos en marcha. Llevó un tiempo de casi tres años pero estamos por terminarlo, haciendo unos ajustes con una flotada completa del río y un vuelo de ida y vuelta hasta Confluencia para tomar imágenes aéreas que son muy impactantes”.

Además, “también hicimos cuatro entrevistas a técnicos: geólogos, biólogos, gente que participó muy directamente en toda la movida… Voy a repartirle una copia sin costo a todas las escuelas públicas de la zona, primarias y secundarias, incentivando el cumplimiento de una ordenanza municipal que establece que todos los 8 de octubre se dicten clases alusivas al tema. La Municipalidad dictó que se recuerde al 8 de octubre como Día del Abrazo al Limay”.

Ayer y hoy

El realizador anticipó el contenido de su película. “El documental que voy a presentar tiene una primera parte que está dedicada exclusivamente al agua en general, como bien muy importante y que va a ser motivo de mucha discusión durante los futuros años. Después, hay una reseña de toda la acción que llevó adelante la Comunidad de la Cuenca del Nahuel Huapi, el grupo que se organizó para luchar contra la construcción y después, están las entrevistas, con imágenes de la flotada y la recorrida aérea que hicimos para el documental. El final cierra con la grabación que se hizo en aquella oportunidad, unos 5 o 7 minutos de un video que filmó Alejandro Yanielo, donde se ve la concurrencia, las miles de personas que fueron, la presencia de los kayakistas, de los jinetes… Es cortito pero muy demostrativo y emocionante, porque revé toda la situación de aquel momento”.

Videla Dorna es un absoluto debutante en el mundo de los formatos audiovisuales. “No tenía ningún antecedente, siempre pensé que me gustaría hacer algo respecto y bueno, se dio la oportunidad y me largué”. Pero además, su película será oportuna porque “el proyecto no está retirado de la Secretaría de Energía. De todos modos es absolutamente inviable aunque sabemos que a veces hay cosas que le pueden torcer la mano a la gente, pero tendrían que modificar varias leyes, entre ellas, la de Parques Nacionales”.

Recordó el inminente documentalista que “en aquella oportunidad, la APN se opuso rotundamente a la construcción de la represa y lo sigue haciendo porque es un parque nacional y no se puede distorsionar tan gravemente su mecánica natural. El último tramo del río Limay que queda libre y sin contaminación es este porque el otro pedacito que queda sin represas, ahí en Plottier llegando a Neuquén, está totalmente contaminado por las aguas servidas se vuelvan al río. No le quedan al Limay más que estos 60 kilómetros libres y vírgenes, de acuerdo a lo que la naturaleza dispuso. Entonces, hay que defenderlo a muerte”. Debería explotar de gente la Biblioteca Sarmiento…

Protagonista de la historia

Como director del documental a estrenar, Carlos Daniel Videla Dorna tiene una ventaja: fue partícipe directo de los acontecimientos que su película narra. “Fui uno de los integrantes originales de la Comunidad de la Cuenca del Nahuel Huapi. Como pasa siempre, en las primeras reuniones éramos un par de centenas, después éramos 70 u 80 y finalmente, terminamos 10 o 15. Básicamente, fuimos 12 personas los que tuvimos continuidad durante casi un año. Yo participé desde el principio, prácticamente”.

No obstante, al emprendimiento cinematográfico “lo estoy bancando yo solo, no tengo ningún sponsor ni nada, por eso me llevó un poco de tiempo, para juntar con mi trabajo un restito para hacerle frente”, compartió. “La idea original es dejar en un documento aquel hecho tan importante. En lugar de leerlo, que sería muy tedioso y muy largo, se ha puesto en un video con tomas muy lindas del río y con un texto que acompaña todas esas temas. No es un documental tradicional y por otro lado, hay que entender que es mi primera vez, entonces seguramente va a tener cosas que no se ajusten a los cánones estrictos de los documentales”.

De todas maneras, prometió novedad. “Pienso que va a ser una cosa distinta, lo que importa fundamentalmente es el relato de toda la gesta. Tiene que tomarse en cuenta como un punto de partida ante cualquier otro tipo de agresión que pueda haber en la zona con el ambiente que hemos elegido para vivir. En definitiva, eso fue lo que se defendió en aquella oportunidad. Hay que tener en cuenta que el personaje central es el hombre, sus intereses y decisiones. Lo que yo pretendo es justamente, sentar la idea de que tenemos que defender con uñas y dientes lo que creemos que nos pertenece, exponiendo las razones para las acciones que llevamos adelante”.

FUENTE: El Cordillerano