Rio Gallegos.-Alumnos, junto a profesores, en el sector de Automotores adecuaron distintas técnicas para elaborar biodiesel, para el cual se utilizó aceite cocinado (sin agregados) y se puso en marcha un Rastrojero modelo 77. El Vicedirector de la institución se mostró orgulloso por el logro y señaló que por medio de las netbooks se efectuó el proceso de investigación, los cálculos preliminares y el diseño gráfico del proceso.
En el segundo estudio evaluativo sobre el Programa Conectar Igualdad, denominado “Cambios y continuidades en la escuela secundaria: la universidad pública conectando miradas”, realizado por 15 universidades nacionales, destacó el trabajo que viene desarrollando en el Industrial N° 6 desde hace dos años y con el cual lograron un cambio de energía: “A través de las netbooks, alumnos de Río Gallegos produjeron biocombustible”, detalló el reconocimiento. Especificando este proyecto, como así también la importancia del mismo, y el esfuerzo que demandó, Pablo Pera, vicedirector de la escuela técnica, manifestó: “Más allá de todo, lo importante del logro no es que se innovó, sino que se adecuaron distintas técnicas para elaborar biodiesel y se pensó en una particularmente para poder llegar al producto final, que sea cien por cien biodiesel, sin agregados”. Fue así, que se utilizó aceite cocinado, con 30 litros de aceite generaron 23 de biodiesel y siete de glicerol.
En este sentido, manifestó a TiempoSur que
“el mismo se logró mediante un proceso que surgió en el aula de Automotores, por iniciativa de uno de los profesores y los alumnos” y a partir de allí se construyó con materiales totalmente reciclados el reactor.
Vale destacar que este reactor “es el que concentra todas las etapas en las que se fue haciendo cada uno de los procesos: del refinamiento, el filtrado, el preparado, el agregado del componente que le da octanaje y finalmente se vuelve a mezclar.
Luego, se hicieron los controles pertinentes en el área de los laboratorios químicos para mejorarlo y en esa etapa se empezó a probar en el Rastrojero modelo 77. Este vehículo pertenecía a la Fuerza Aérea Argentina, teniéndolo en comodato y en este caso el uso didáctico fue la adaptación del mismo, explicó el Vicedirector.
A su vez, Pablo Pera resaltó el trabajo en conjunto y el aporte de cada una de las partes: “Es por esto que hablamos siempre de la comunidad educativa en la Escuela Industrial N° 6. De los chicos puede surgir una idea tan importante como de nosotros, o una solución necesaria que hace tiempo no veíamos. Ninguno es dueño de la verdad”.
Importancia de las netbooks- Al ser consultado por el rol de las netbooks para que sea un hecho el biodiesel, manifestó: “Si bien no hubo una elaboración de un producto ni se elaboró nada nuevo, si se adaptaron varios sistemas. En todo el proceso de investigación, como el de cálculos preliminares, tuvo un papel fundamental el tema de las netbooks, todos los chicos pudieron realizar el trabajo de investigación y las conclusiones”.
De la misma forma, recalcó la importancia del software libres que contienen, con el cual se diseñó gráficamente cómo iba a ser todo el proceso. Es decir, cada una de las etapas fueron dibujadas a escala, con las medidas correspondientes, al igual que los caudales que se iban a necesitar y las temperaturas a las que se debía llevar el aceite para hacer un filtrado apropiado, entre otras cuestiones, contó.
Sorpresa y mejora-Por otra parte, Pera comentó que el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) ya le ha estado haciendo varias pruebas y hay varios compromisos, luego de que visitaron esta ciudad capital en busca de algunas muestras.
En cuanto a esto, aclaro que “si bien lo primero que nos dijeron fue que era una copia, que no innovamos, siendo que la UTN y la UNPA están trabajando en esto”, la realidad es que “aún se encuentran en una etapa de investigación y nosotros no solo terminamos la etapa esa, sino que construimos el reactor, elaboramos biodiesel con las pruebas químicas, lo han mejorado y lo estamos utilizando en nuestro Rastrojero”.
Finalmente, el directivo, haciendo referencia a cómo fue visto en las diversas Ferias de Ciencia que han participado, al igual que en “Argentina Vuela”, expresó: “Lo que más llamó la atención es que no se mezcla, que no tiene agregados de gasoil, sino que es 100% biodiesel y se mostraron muy interesados en ver cómo se hizo para que funcione”, a lo cual añadió que “a muchos lugares hemos llevado tanto el reactor como el vehículo, por la vía pública, siendo que está habilitado y es uno más”, finalizó.
Fuente: Tiempo Sur