El hielo marino polar total cubría 16,21 millones de kilómetros cuadrados, dos millones menos que la extensión mínima global promedio para el periodo 1981-2010.
Los autores estiman que esta pérdida equivale a un trozo de hielo más grande que México.
Además, alertan que la extensión máxima de hielo marino del Ártico cayó en un 2,8 por ciento por década en promedio desde 1979.
Por otra parte, en la Antártida, el récord de 2017 respecto al mínimo de hielo marino anual, establecido en 2,11 millones de kilómetros cuadrados, fue 184 mil kilómetros menor a la anterior extensión más baja del registro satelital, que data de 1997.
El hielo que flota sobre el océano Glacial Ártico y los mares circundantes aumenta o decrece siguiendo un ciclo estacional que va desde marzo hasta septiembre.
A medida que las temperaturas árticas van cayendo en otoño e invierno, la cubierta de hielo vuelve a crecer hasta que alcanza su extensión máxima anual, normalmente en marzo.
El anillo de hielo marino alrededor del continente antártico se comporta de manera parecida, con el calendario invertido, y alcanza habitualmente su máximo en septiembre y su mínimo en febrero.