Argentina, con la ayuda de la Cruz Roja Internacional, comenzará en junio próximo la identificación de los 123 soldados cuyos nombres se desconocen y están sepultados en las islas Malvinas tras la guerra protagonizada con el Reino Unido y de la que este domingo se conmemoran 35 años de su inicio.

“Hemos recorrido un largo camino hasta llegar a esta instancia y lo tomamos como un logro. Es algo terrible no haber podido garantizar en estos años el derecho a la identidad de las personas allí sepultadas”, dijo a dpa Ernesto Alonso, integrante del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas de la ciudad de La Plata (CECIM).

Semanas atrás miembros de la Cruz Roja viajaron a Malvinas para organizar los trabajos previos a la exhumación de los restos de los argentinos caídos en la guerra y que hasta ahora no pudieron ser identificados.

Las tareas comenzarán en un lapso de dos meses, luego de un acuerdo al que arribaron los gobiernos de Argentina y el Reino Unido en diciembre último, en el que acordaron que los trabajos de identificación estuvieran a cargo de la Cruz Roja y de miembros del Equipo de Antropología Forense argentino.

Los 123 soldados enterrados en el cementerio de Darwin lo están bajo la leyenda “Soldado argentino sólo conocido por Dios”.

“No queremos que solo Dios tenga el privilegio de conocer la identidad de ese soldado, sino también nosotros, que fuimos sus compañeros, sus familiares y toda la sociedad argentina”, expresó a dpa Gustavo Pirich, que el 2 de abril de 1982 tenía 19 años cuando las fuerzas militares argentinas lo reclutaron para recuperar la soberanía de Malvinas, ocupadas por el Reino Unido desde 1833.

La misión humanitaria de identificar a los soldados en Darwin, explicó Alonso, consistirá en exhumar los cuerpos y luego cotejar las muestras genéticas que allí se tomen con las de sus familiares.

Hasta el momento 84 familias dieron su consentimiento para aportar sus muestras genéticas a la comparación con las obtenidas en Malvinas. Los cuerpos, según el acuerdo al que llegaron los gobiernos, no serán repatriados.

La Secretaría de Derechos Humanos argentina estimó que la identificación de los cuerpos se desarrollará hasta diciembre próximo. La iniciativa, aclaró oficialmente, “no afecta de ningún modo el reclamo por los derechos soberanos argentinos sobre las Islas Malvinas”.

Alonso recordó que fue el CECIM el que en 2011 se presentó en la Justicia argentina para reclamar la identificación de los soldados. “Recorriendo el cementerio nos dimos cuenta que no encontrábamos el nombre de nuestros compañeros. Eso tiene que ver con el grado de impericia de quienes condujeron la guerra de Malvinas: nos mandaron sin siquiera una chapa identificatoria”.

Pirich, en tanto, destacó que conocer los nombres de los enterrados en las islas permitirá, además, que sus familias pueden realizar el duelo que postergan desde hace más de tres décadas. “Inclusive, podrán colocar allí una fotografía y señalar la tumba con el símbolo de la religión a la que pertenecía la víctima”, mencionó.

En el cementerio de Darwin hay 237 tumbas de argentinos, todas marcadas con cruces.

Argentina, gobernada en aquella época por una dictadura militar, y el Reino Unido se enfrentaron en 1982 en una guerra por la soberanía sobre Malvinas, un conflicto armado que en poco más de dos meses causó la muerte de 649 argentinos, 255 británicos y tres isleños.

Tras el conflicto armado, unos 600 soldados argentinos se suicidaron.