La ministra de Seguridad Patricia Bullrich se presentó en la mañana de este miércoles ante la comisión de Seguridad y Narcotráfico del Senado para brindar un informe sobre el caso de Santiago Maldonado, quien permanece desaparecido desde el 1° de agosto tras la represión de la Gendarmería Nacional a la comunidad mapuche Pu Lof en Resistencia Cushamen de Chubut.

La ministra de Seguridad, desde las 9 se sentó en la Cámara Alta para dar explicaciones sobre el rol de la Gendarmería en los hechos de ese día.

“Nuestro Gobierno de ninguna manera podría avalar algún tipo de situación de violencia en la Gendarmería Nacional. No tenemos indicios de que la Gendarmería haya actuado con violencia y haya tenido algún detenido, pero tampoco nos cerramos a que pudo haber sucedido algo”, aseguró Bullrich durante su informe.

Ante las preguntas de los senadores aseguró que el Gobierno no cuenta con pruebas suficientes para desplazar al jefe del operativo ni a ningún otro gendarme de su cargo.

Según el informe de Bullrich la Gendarmería procedió a “despejar la ruta y comienza una situación de ciertos enfrentamientos a partir de piedras que son tiradas por los manifestantes y la Gendarmería Nacional a las 11.15, luego de avanzar sobre la ruta para despejar la última barricada que quedaba, avanza a partir de una situación de agresión a dos gendarmes que estaban ahí, avanza y entra con consentimiento de la orden judicial hacia la zona de el Lof”. La ministra no se privó de mencionar que los manifestantes estaban con caras tapadas, en un nuevo intento por justificar la brutalidad de la represión.

Vale recordar que según el propio juez federal Guido Otranto, él dio la orden de desalojar la ruta pero no de ingresar al campo donde habita la comunidad mapuche.

El cinismo parece no tener límites. Bullrich habla de dos gendarmes agredidos cuando la comunidad mapuche habla de agresiones y violaciones a sus derechos de manera sistemática por parte de las fuerzas de seguridad. Las mismas fuerzas de seguridad que mantienen desaparecido a Santiago Maldonado hace más ya quince días.

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La ministra detalló que ya fueron presentados al Juzgado Federal del juez Otranto, que también entiende en la causa de la desaparición de Maldonado, los informes de la Gendarmería en los que se detalla todo lo sucedido y de brindan los resultados de los peritajes a las camionetas y los cuarteles de la fuerza que fueron inspeccionados. Con respecto a esto, Bullrich se encargó de aclarar que según estos informes de la fuerza, ese día “no se procede a ninguna detención”. “Tenemos material fotográfico para que puedan analizar”, agregó.

“Todas la hipótesis tienen que abrirse, ésa es nuestra responsabilidad como Estado”, enfatizó Bullrich. Sin embargo, la hipótesis que certifican los testigos que vieron con sus propios ojos cómo la Gendarmería se llevaba a Santiago, es prácticamente descartada por la ministra. ¿En qué se basa la funcionaria para desacreditar tal hipótesis? En los informes que la misma Gendarmería se encargó de elaborar.

Una hipótesis que estaría considerando el Gobierno, además de la que involucra a la fuerza de seguridad, es que Santiago está perdido.

Sin embargo, la hipótesis que más parece cuadrarle a la ministra es que la comunidad mapuche es un grupo de violentos irracionales que atacan propiedades, con conexiones con grupos terroristas y financiamientos de otras partes del mundo. “Los mapuches son un grupo de extrema violencia”, sostuvo en el Senado para refrendar la versión de la realidad que el Gobierno se encargó de difundir desde que Santiago fue desaparecido.

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Bullrich habló de la necesidad de “bajar los niveles de violencia y lograr que la zona viva en paz”. Quienes deben bajar los niveles de violencia son las fuerzas de seguridad del Estado y los terratenientes, que como bien denuncia Facundo Jones Huala, persiguen, torturan y matan sistemáticamente a su comunidad desde hace años.

“Recién diez días después se pudo acceder a su domicilio para saber qué tipo de elementos podía haber en su domicilio”. De esta manera, Bullrich no se privó de volver a señalar como responsables de las demoras en la investigación, al entorno de Santiago. Recordemos que entre las primeras declaraciones oficiales sobre los hechos, se dijo que la familia y los mapuches no estaban colaborando en el aporte de información básica. Inicialmente, el Gobierno tenía más interés en que se allanara la casa de la víctima, antes que los escuadrones de Gendarmería.

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Bullrich solo se presentó ante el Senado para legitimar el accionar de la fuerza, criminalizar y demonizar a la comunidad mapuche y lavarse la cara como Estado. Lo que no señaló es que más que abrir hipótesis, la principal responsabilidad del Estado consiste en encontrar a Santiago con vida. Parece que esa no es la voluntad de la ministra.

Fuente: http://www.laizquierdadiario.com/Patricia-Bullrich-habla-en-el-Senado-Los-mapuches-son-un-grupo-de-extrema-violencia