La Administración de Parques Nacionales (APN) decidió apenas apercibir al agente Horacio Paradela -con siete días de suspensión- y a Claudio Chehébar, con tres días, por la muerte de un huemul en el mes de marzo del año pasado, cuando el abogado sumariante había requerido 20 para cada uno, lo cual ya había parecido poco en la opinión pública.
La resolución, que no fue difundida por el organismo al igual que todo el proceso, es por demás polémica, por tratarse de un animal autóctono en peligro de extinción y declarado monumento nacional hace más de 20 años.
¿Por qué es polémica la decisión? Por que el organismo de protección señala los numerosos errores que se cometieron en el operativo de rescate del huemul, pero parecen no ser suficientes y multa a los trabajadores con una pena menor.
Parques reconoce en el fallo, que “un protocolo constituye un instrumento en que se especifica la aplicación de un procedimiento específico a seguir en casos concretos y de emergencia, cuya implementación no se puede incumplir ni delegar” y que en este caso concreto había dos protocolos –agrega-, debió aplicarse el de “Fauna accidentada o en riesgo”, pero que no se hizo.
Cabe recordar, que en su informe inicial, los especialistas de Parques (Carla Pozzi, Susana Seijas y el propio Paradela) expusieron que el “Programa Nacional del Huemul no cuenta con lo necesario (protocolo, elementos para dormir al animal), para abordar una situación compleja y que la Intendencia del Parque no tiene una fluida operatividad que permita abordar” este tipo de situaciones.
Es decir, para el organismo existen dos protocolos y para los especialistas no hay ninguno (según el informe).
En este dictamen final al que tuvo acceso El Cordillerano, el presidente de la APN Eugenio Breard y miembros del directorio, afirman respecto de Horacio Paradela lo siguiente: “habiendo sido comunicado de la situación, no ordenó ni hizo estricto cumplimiento del protocolo mencionado” y en otro párrafo añade que “tampoco él mismo dio intervención a la veterinaria indicada en el protocolo”. Pero decidieron bajarle de 20 a siete los días de suspensión por no tener antecedentes disciplinarios y por contar con buenas calificaciones.
El caso de Claudio Chehébar es aún más insólito. La APN entiende en su resolución del caso, que fue él quien ordenó que se “enterrara al huemul y así se hizo, sin realizar la necropsia del ejemplar y, por ende, se perdió importante material para la investigación que sirviera para la preservación de una especie de valor especial en peligro de extinción”.
No obstante eso, continúa exponiendo que “pese al estado de estrés que mostró el animal”, el agente en cuestión, “permitió que se le inyectara un sedante” y que “en su declaración indagatoria demostró tener concretos y especiales conocimientos sobre el huemul y, específicamente, sobre el serio riesgo de muerte que el estrés le provoca y el efecto adverso de aplicarles un sedante”, lo cual surge del protocolo que establece el “Procedimiento a seguir ante un atropellamiento de un huemul en caminos” que había sido notificado por el propio Chehébar en su carácter de director de la Dirección Regional Patagonia Norte a todos los Parques Nacionales con presencia de huemul.
Y como si fuera poco, el directorio de Parques consideró el accionar de Chehébar como “negligente”, “al haber permitido que se manipulara al animal a pesar de su estado de estrés y que se le aplicara un sedante en tal condición”.
Pero increíblemente, tuvieron más peso los atenuantes. “Que sin perjuicio de lo mencionado respecto de la valoración de la conducta del Lic. Chehébar, corresponde resaltar que las especiales circunstancias que se verificaban en el lugar del hecho, particularmente la existencia de perros en la zona, no estaban contempladas en el ‘Procedimiento a seguir ante un atropellamiento de un huemul en caminos’”.
“Que esta última circunstancia sumada a la buena conducta y falta de antecedentes disciplinarios, justifica la reducción de la sanción propuesta por el director a cargo de la Dirección de Sumarios e Investigaciones Administrativas” y por eso sólo, le computaron tres días de suspensión en lugar de los veinte iniciales.
El hecho
El 31 de mayo de 2016, una publicación de este diario, dio cuenta de dos informes que explicaban que un huemul macho, sano y sin heridas, apareció el 18 de marzo del mismo año en la zona de El Manso. Fue atado por un poblador y un guardaparque quiso soltarlo, pero Damián Mujica, intendente del Parque Nahuel Huapi ordenó esperar a que lleguen los “expertos y especialistas” a analizar al animal.
Éstos arribaron 14 horas después de encontrado el espécimen, pero sin el equipamiento necesario, ni sedantes, ni radio collares, y ni siquiera llevaron el kit básico de emergencias, según sus propias palabras. Además, los expertos expusieron que carecen de un protocolo y de presupuesto. Tras varias horas de idas y vueltas, el animal murió el 19 de marzo. Fue tapado con ramas y troncos y los especialistas se fueron. Todo esto, según dos informes a los que accedió este medio.
A raíz de que se dio a conocer el caso, la APN inició un sumario de investigación interna, que tuvo resolución recién este 10 de agosto. Allí, se aplicó la suspensión a dos agentes de planta del organismo y se evitó opinar del caso de la bióloga Carla Pozzi, por no tener un contrato dependiente de Parques.
Fuente: http://noticiasnqn.com.ar/2017/08/parques-suspendio-3-7-dias-dos-agentes-la-muerte-huemul/