Viedma.-“Espero que las amenazas del diputado Sergio Wisky sobre las consecuencias en la relación con Nación queden sólo en palabras.
En el Gobierno anterior ya estuvimos castigados por defender a los fruticultores”, señaló el Mandatario Provincial.
“Con el sólo hecho de discutir planta si o planta no tuvimos un gran nivel de tensión social y alteración de la paz social en la provincia en estos últimos meses. En este contexto no tenía sentido seguir avanzando porque lo único que se lograría sería acrecentar el nivel de crispación. Sin dudas creo que tomé la decisión correcta para la provincia, más allá que en principio consideramos que era un proyecto muy importante para Río Negro”. Así se expresó hoy el gobernador Alberto Weretilneck respecto a la decisión de no autorizar la instalación de la usina de energía termonuclear en la provincia, comunicada a Nación el viernes último.
En diálogo con LU19, el Mandatario confió que “no fue una decisión sencilla. La instalación de la planta de energía nuclear tenía el objetivo de generar una nueva economía en la zona este de la provincia, que hoy tiene serios problemas de falta de trabajo y depende principalmente del empleo público. Confiábamos que esa inversión de 8 mil millones de dólares generaría empleo y actividades económicas iba a ser movilizadora de la economía”, recordó.
Añadió que “si bien ese fue el sentido del apoyo realizado desde un principio, desde mayo hasta aquí, lo que empezó como una movilización de algunos sectores, fue sumando voces y opiniones. En las escuelas, en las familias, en todos los ámbitos y ciudades se discutió el tema y por distintas fue creciendo la postura negativa a esta iniciativa”.
El Gobernador recordó que “hubo un inmenso rechazo en toda la costa, desde Viedma, San Antonio y Sierra Grande. Siempre dije que este emprendimiento se haría solo con si contaba con licencia social y el acompañamiento de la sociedad. La verdad, fueron contados los que brindaron su apoyo, ya que ni siquiera los comerciantes o los empresarios se mostraron a favor, cuando serían los beneficiados por el movimiento económico; mientras que los dirigentes gremiales muy tibios, un sólo un Intendente de mostró a favor, como es el caso de Nelson Iribarren”.
“Entonces, como Gobierno de la Provincia no tenía sentido seguir planteando este tema con un rechazo tan importante de la gente y sin posibilidades de revertir esta situación. Es un proceso largo, porque se iba a comenzar a construir en 2020 para terminarse en 2027. Era el momento para tomar una decisión porque todavía no había ningún contrato o documento firmado y solo se estaba trabajando en la elección de los posibles lugares de emplazamiento”, dijo.
En la entrevista, Weretilneck consideró que “si con solo discutir si planta si o planta no tuvimos este nivel de tensión social y alteración de la paz social, no tenía sentido seguir avanzando, porque solamente se iba a acrecentar el nivel de crispación”.
“Como Gobernador no iba a poder llevar adelante un proceso de estas características con el rechazo que había. Era un momento oportuno porque no hay estudios muy avanzados ni tierras compradas. Cuanto más avanzara, más crispación y rechazo habría en la sociedad”, señaló.
No obstante, consideró que “se ha perdido una posibilidad importante, pero nada se puede construir sin el consenso social. Desde que fui intendente dije que no me llevo a nadie por delante, soy respetuoso, sé escuchar y tomo en cuenta la opinión de la gente. No hice más que escuchar el mensaje de la población”.
“A pesar de todo lo que se diga estoy tranquilo, porque he evitado una división fuerte en los rionegrinos”, resaltó el Gobernador Weretilneck.
Explicó que nunca hubo ningún acuerdo firmado con la Provincia de Río Negro. Sólo existen dos acuerdos entre el Gobierno de China y el de Argentina. El primero de ellos se firmó en el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, donde el país asiático se compromete a construir las dos centrales hidroeléctricas en Santa Cruz y las dos centrales termonucleares, una en Atucha y la quinta en otra región.
“Ese convenio fue aprobado por el Congreso Nacional, incluso con el aval de los legisladores nacionales que hoy dicen estar en contra de la central. Luego el presidente Mauricio Macri mantiene este convenio firmado por el país, y se le propone a Río Negro construir la central acá”, recordó.
Por otra parte, el Mandatario Provincial sostuvo que “esperemos que no haya reprimendas de Nación, y que esta amenaza del diputado nacional Sergio Wisky respecto que cambiaría el trato de Nación a Río Negro, que habíamos perdido la confianza y ya no sería lo mismo no se concrete. Esperemos que no se transforme en una realidad y sean sólo palabras”.
“Esperemos que no se concrete esto de una relación lesionada y cuestiones por el estilo. Ya nos pasó una vez con Cristina Fernández, cuando defendimos a los productores de peras y manzanas y no pude entrar por tres o cuatro meses a la Casa Rosada. Espero que no pase lo mismo y confío en que así será”, indicó.
El Gobernador dijo además que “hemos avisado con la debida anticipación al Gobierno Nacional que no tenga en cuenta a Río Negro para una Centra nuclear. No debería haber enojo, fundamentalmente porque le transmitimos lo mismo que a la sociedad, y sobre todo porque estoy asumiendo que no estaban dadas las condiciones para un emprendimiento de estas características”.
“No queríamos generar una división de la gente por este tema. Por más que algunos no lo entiendan y se molesten, es una decisión mirando al futuro y creo que es la decisión correcta”, manifestó finalmente.
Fuente: GOBIERNO DE RÍO NEGRO