En el marco del alerta epidemiológico emitido por el Ministerio de Salud de la Nación, en relación al aumento de casos de fiebre amarilla en Brasil, la Dirección de Fauna Silvestre y Conservación de la Biodiversidad del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable profundiza el monitoreo de los monos aulladores, especie que funciona como centinela de esta enfermedad.
En este contexto, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, que encabeza Sergio Bergman, trabaja en conjunto con las provincias de Corrientes y Misiones; y el Centro de Investigaciones del Bosque Atlántico (CEIBA) para fortalecer la red de vigilancia de decesos de monos por fiebre amarilla. Así, se comenzó a analiza el circuito de detección, notificación y diagnóstico de decesos de estos animales por la enfermedad. A su vez, se repasaron los procedimientos en cuanto a los requerimientos de calidad de las muestras para su análisis en el laboratorio y las normas de bioseguridad.
La fiebre amarilla se transmite únicamente por la picadura de su vector, el mosquito, y puede infectar a monos y a personas. Por lo que los simios no representan un peligro para seres humanos. De esta manera, la cartera ambiental recomienda, ante el hallazgo de un mono muerto, informar a las autoridades locales ambientales o a centros de salud más cercanos y evitar el contacto con el ejemplar.
Fuente: Ambiente de Nación