La Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos, más conocida como NASA, como indican sus siglas, lanzará en los últimos días de septiembre al espacio un instrumento láser para analizar con alta precisión los cambios en la masa del hielo polar de la Tierra.
El satélite de la NASA, bautizado ICESat-2, medirá el cambio de elevación promedio anual de la capa de hielo terrestre que cubre Groenlandia y la Antártida, capturando 60.000 mediciones por segundo.
“Las nuevas tecnologías de observación de ICESat-2 ampliarán nuestro conocimiento sobre cómo las capas de hielo ubicadas en las zonas de Groenlandia y la Antártida contribuyen al aumento del nivel del mar”, aseguró en un breve comunicado Michael Freilich, director de la División de Ciencias de la Tierra de la NASA.
Este satélite “ampliará y mejorará” la investigación de la NASA de los últimos 15 años sobre el cambio del hielo polar, que comenzó en 2003 con la primera misión de ICESat y continuó en 2009 con la Operación Ice Bridge.
“ICESat-2 representa un gran salto tecnológico en nuestra capacidad para medir los cambios en la altura del hielo: su sistema de altímetro láser topográfico avanzado (ATLAS) mide la altura según el tiempo que tardan los fotones de luz individuales en viajar desde la nave espacial a la Tierra y viceversa”, señaló la NASA. ATLAS disparará 10.000 veces por segundo, enviando cientos de trillones de fotones a la superficie polar. Gracias a esto, ICESat-2 obtendrá una vista “mucho más detallada” de la superficie del hielo que su predecesor, ICESat.
El ICESat-2 medirá la elevación promedio anual de la capa de hielo de Groenlandia y la Antártida.
A medida que circula la Tierra de polo a polo, el nuevo satélite calculará las alturas de hielo a lo largo del mismo itinerario en las regiones polares cuatro veces al año. De esta manera estará proporcionando un control estacional y anual de los cambios en la superficie.
En los últimos años, el derretimiento de las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida elevó el nivel global del mar en más de un milímetro al año, representando aproximadamente un tercio del aumento observado del nivel del mar, y la tasa “está aumentando”, según la NASA. El objetivo de la agencia estadounidense es que los datos de ICESat-2 ayuden a los investigadores a reducir el rango de incertidumbre en las predicciones del aumento futuro del nivel del mar y conectar esos cambios a los factores climáticos. ICESat-2 también realizará mediciones precisas para determinar el espesor y el volumen del hielo marino.
Hasta ahora, la agencia estadounidense midió rutinariamente el área cubierta por hielo marino y según los resultados que extrajeron de estas pruebas se observó un declive de ese tipo de superficie en el Ártico de alrededor del 40 por ciento desde 1980.
Europa y una misión meteorológica
El satélite europeo Aeolus fue lanzado el miércoles al espacio desde una estación en Kourou, en la Guayana francesa, lo que marca el comienzo de una misión coordinada desde Darmstadt (oeste de Alemania) para mejorar los pronósticos meteorológicos a través de una mayor precisión en la observación de los vientos.
La misión puede ayudar a determinar, entre otros asuntos, la influencia que pueden tener los vientos tropicales del pacífico en la dinámica eólica en la atmósfera europea.