Consideran que la Argentina es un laboratorio natural de climas extremos. Estudiarán durante seis meses las fuertes tormentas que se producen en Córdoba, Santa Fe y Mendoza.
Siempre se dijo que la Argentina tiene todos los climas, paisajes y bellezas naturales que son la envidia de muchos países. Pero además de todas las maravillas que se extienden desde Tierra del Fuego hasta Jujuy, nuestro país despierta la curiosidad de los más avanzados cazadores de tormentas del mundo. Y es que científicos de Estados Unidos, junto con investigadores locales de organismos públicos y de educación, realizarán un profundo estudio en la región centro del país, considerada “un verdadero laboratorio natural que concentra fenómenos meteorológicos únicos para un mismo territorio”, según afirman los especialistas.
La misión de los investigadores estadounidenses, que contarán con la colaboración de expertos locales, busca echar luz sobre cómo se producen las grandes tormentas que incluyen granizo, vientos huracanados, lluvias torrenciales e incluso tornados mortales, fenómenos que pueden tener impactos catastróficos. El fin del trabajo, en definitiva, servirá para mejorar los pronósticos climáticos a nivel mundial.
El proyecto Relámpago, auspiciado por la National Science Foundation (NSF) de Estados Unidos, perseguirá tormentas en la zona de las sierras de Córdoba y en Mendoza, y para ello se instalarán radares que funcionan en distintas bandas del espectro electromagnético, estaciones y radares móviles montados sobre camiones.