«Se trata de un producto de alta volatilidad, se gasifica muy fácilmente y vemos que trae problemas en los arbolados urbanos como también cultivos sensibles», afirmó el ministro de la Producción, Ricardo Moralejo, por lo que «perjudica tanto a la producción urbana como rural, como así también a aquellos productores que quieren trabajar en producciones orgánicas, porque puede ser de fácil contaminación».
La Dirección de Agricultura del mencionado Ministerio, como órgano de aplicación, informó la puesta en vigencia de la Disposición Nº 18/19, la cual prohíbe la comercialización, aplicación y almacenamiento en todo el territorio provincial, del herbicida 2.4D en su formulación éter butílico e isobutílico.
El director de Agricultura, Carlos Ferrero, anunció la medida y manifestó que la decisión fue tomada por la Comisión Provincial de Sanidad Vegetal (Coprosave), la cual además regula el uso del 2.4D en su formulación ácida al 30%, desde el 1 de octubre al 31 de marzo de cada año.
A su vez, informó que esta decisión fue publicada en el Boletín Oficial el 10 de mayo y entra en vigencia tres meses después de dicha publicación, con lo cual a partir del 10 de agosto, quedará prohibido el uso de este producto.
En ese sentido, Ferrero recordó que hasta el momento en La Pampa regía la disposición 2043/06, que restringía el uso del 2.4D hacia una determinada época del año.
Por otra parte, sostuvo que se llegó a este punto a través de una presentación realizada en el mes de diciembre por técnicos del INTA en la Coprosave y que «el fin es hacer una protección integral del ambiente, por eso la prohibición».
El funcionario señaló además que la Dirección de Agricultura como autoridad de aplicación será la encargada ante las denuncias, de determinar quiénes son los responsables, ante los cuales habrá sanciones, «tanto para el aplicador como el asesor de la empresa y para el dueño del cultivo».
Formulaciones seguras.
Ferrero explicó que el mencionado herbicida se utiliza «sobre todo para el control de malezas de hoja ancha, por lo general para barbecho y para malezas en cereales de invierno».
«La idea no es quitar una herramienta del mercado, sino que el 2.4D tiene otras formulaciones (no la éter) que son más seguras y no son volátiles. La idea es alentar a los técnicos a que hagan uso de las mismas», aclaró el funcionario y agregó que «esta formulación tiene baja presión de vapor y pasa muy fácil a vapor y eso hace que se volatilice y se desparrame al medio ambiente, sumado a las condiciones climáticas de la Provincia».
Para ello reiteró finalmente que hay alternativas que el productor puede usar. «En ese sentido es que se otorga este período de tres meses para que el productor que tiene en stock este producto lo pueda cambiar por otras formulaciones antes de que llegue la campaña de agosto, que es cuando se empieza a utilizar en los cultivos de invierno».
«Una medida importante».
Luego del anuncio de Ferrero, el ministro Moralejo resaltó que «esta es una medida muy importante ya que está reforzando una política que lleva adelante el Ministerio de la Producción, como también el de Seguridad y la Secretaría de Ambiente respecto de crear un ambiente limpio y saludable para la producción de alimentos».
En relación al herbicida, comentó que «se trata de un producto de alta volatilidad, se gasifica muy fácilmente y vemos que trae problemas en los arbolados urbanos como también cultivos sensibles, por lo cual, perjudica tanto a la producción urbana como rural».
Fuente: Diario La Arena