Antártida.-La energía fotovoltaica ya es una realidad en La Antártida. El consorcio Iresud, conformado por la Comisión Nacional de Energía Atómica de Argentina, la Universidad Nacional de San Martín y cinco empresas privadas, ha sido el encargado de llevar una instalación fotovoltaica al sitio más recóndito del mundo.
Se trata de una pequeña instalación para autoconsumo. Situada en la Base Marambio, concretamente en la fachada de un pequeño edificio donde residen los investigadores que trabajan en la base argentina.
“Estamos orgullosos de haber alcanzado este hito tan importante para el proyecto Iresud“, dijo Julio Durán, director del Departamento de Energía Solar de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA ) y director en Iresud.
“Una de las ventajas diferenciales de la energía solar es su carácter renovable y ambientalmente amigable. En el caso de esta instalación en particular, también se pretende demostrar la factibilidad del uso de este tipo de tecnología en climas extremos como el de la Antártida“, resaltó.
Pero los argentinos ya están pensando en llevar un molino eólico a la zona para obtener electricidad. Será este año cuando se instale el aerogenerador. Las renovables llegan a La Antártida, donde no han llegado otras fuentes. Enhorabuena.
Fuente: El Periódico de la Energía