Fortescue rompe el silencio y desmiente el colapso del megaproyecto de hidrógeno verde en Río Negro

Fortescue aclara su continuidad en Argentina pese a rumores de cancelación del proyecto de hidrógeno verde

Viedma, Rio Negro, 7 de agosto de 2024. En las últimas horas, el escenario energético argentino se vio sacudido por una ola de versiones que afirmaban que Fortescue Future Industries (FFI), la gigante australiana de energía verde, había decidido abandonar definitivamente su millonario proyecto de hidrógeno verde en la provincia de Río Negro. Sin embargo, la compañía salió a desmentir categóricamente esas afirmaciones mediante un comunicado oficial que no solo ratifica su presencia en el país, sino que revela detalles clave sobre el estado actual del megaproyecto, sus avances reales y los factores económicos que hoy determinan su ritmo de desarrollo. Estas declaraciones generaron enorme interés debido al impacto potencial que podría tener este emprendimiento en la transición energética, la generación de empleo y la economía regional, y porque se trata de una de las mayores inversiones anunciadas en Argentina vinculadas a energías renovables. El comunicado también aclaró la situación de las tierras, la continuidad de los estudios ambientales y la importancia del Parque Eólico Cerro Policía, ofreciendo un panorama mucho más matizado y estratégico que el que circuló inicialmente en diversos medios y redes sociales, que hablaban de un colapso irreversible del proyecto.

Qué dice Fortescue sobre las versiones de cancelación del proyecto de hidrógeno verde

Según la firma, la información que circuló en torno a una supuesta devolución de tierras y la anulación total del proyecto no solo es inexacta, sino que genera confusión en un contexto en el que la Argentina discute su posicionamiento dentro del mercado mundial del hidrógeno. Fortescue aseguró que continúa instalada en el país, mantiene oficinas activas en Buenos Aires y sostiene equipos trabajando en estudios técnicos esenciales para avanzar en la primera etapa del proyecto. También subrayó que desde el primer día fue claro que el desarrollo completo del complejo de hidrógeno verde depende de condiciones macroeconómicas estables y de un marco regulatorio adecuado, algo que consideran indispensable para enfrentar una inversión anunciada de 8.400 millones de dólares. Esta aclaración no solo desarma las versiones de retirada sino que marca la relevancia que la empresa sigue otorgando al potencial energético de Argentina, uno de los países con mejores recursos eólicos del mundo.

Fortescue Future Industries reafirma su presencia en Argentina y avanza con estudios ambientales en Río Negro

La empresa detalló que actualmente se están realizando estudios de impacto ambiental, mediciones de vientos con mástiles especializados y análisis de ingeniería necesarios para el diseño y la puesta en marcha del Parque Eólico Cerro Policía, una pieza clave del futuro complejo energético. Este parque no es un proyecto menor o aislado, sino el corazón generador que proveerá la energía renovable necesaria para que la eventual planta de hidrógeno verde funcione a gran escala. La continuidad de estos estudios demuestra que, pese a la incertidumbre económica del país, la firma mantiene un compromiso técnico y operativo que exige inversión, presencia local y planificación de largo plazo. Las mediciones de viento son cruciales para determinar la viabilidad de la infraestructura eólica, y su realización indica etapas concretas del proyecto que no se realizarían si la empresa hubiera decidido retirarse. Además, la compañía destacó que el proyecto jamás avanzaría sin un análisis profundo del impacto socioambiental, lo cual es clave para cumplir con estándares globales de sostenibilidad.

El Parque Eólico Cerro Policía: el motor energético del hidrógeno verde en Río Negro

El desarrollo del Parque Eólico Cerro Policía representa uno de los pasos más visibles y tangibles del megaproyecto anunciado en 2020. Localizado en una zona con vientos óptimos, el parque está pensado para alimentar en el futuro la planta de hidrógeno verde que Fortescue planea construir cuando el entorno macroeconómico sea lo suficientemente estable como para permitir un desembolso de miles de millones de dólares. Esta interdependencia entre el parque eólico y la planta de hidrógeno es fundamental: sin energía renovable propia, el proyecto perdería su esencia ambiental y su competitividad internacional. La empresa remarcó que esta etapa inicial no se ha detenido, y que el avance de los estudios confirma que el proyecto sigue con vida. Al mismo tiempo, las autoridades provinciales y los especialistas del sector energético coinciden en que Cerro Policía tendría el potencial de convertirse en uno de los parques eólicos más grandes del país, lo que posicionaría a Río Negro como un actor estratégico dentro de la industria energética del Cono Sur. Si se concretara en su totalidad, este parque sería también un atractivo imán para nuevas inversiones vinculadas a la energía renovable y a la industrialización del hidrógeno en América Latina.

Condiciones macroeconómicas: la clave que define el ritmo del proyecto de hidrógeno verde

Fortescue destacó que, si bien el proyecto de hidrógeno verde en Río Negro fue anunciado como el más grande de Argentina y uno de los de mayor envergadura en la región, siempre dejó en claro que su ejecución total dependería de variables económicas del país, incluyendo la estabilidad cambiaria, la seguridad jurídica, la previsibilidad regulatoria y la existencia de un marco legal específico para este sector emergente. La coyuntura argentina, marcada por ciclos económicos turbulentos y cambios frecuentes en las reglas del juego, obliga a la compañía a avanzar con prudencia y a priorizar etapas preliminares antes de movilizar inversiones gigantescas. Esta postura es consistente con la estrategia global de FFI, que busca asegurar que cada megaproyecto de hidrógeno verde cuente con un entorno estable antes de avanzar a fases de producción e industrialización. Aun así, la empresa dejó en claro que no ha abandonado su visión para Argentina y que sigue evaluando el panorama para determinar los próximos pasos.

Impacto de la Ley de Bases y del RIGI en el futuro del proyecto de hidrógeno verde

Uno de los elementos centrales del comunicado de Fortescue fue la referencia explícita a la aprobación de la Ley de Bases y del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), herramientas clave que el Gobierno nacional impulsa para atraer capital internacional. La empresa celebró la aprobación de estas normativas y afirmó que se encuentra a la espera de la reglamentación final para evaluar cómo se aplicarán las disposiciones a proyectos como el de Río Negro. Este punto es fundamental: el RIGI podría otorgar beneficios fiscales y garantías de estabilidad por décadas, condiciones necesarias para que inversiones millonarias como esta sean viables. Si las reglas de juego son claras y favorables, Fortescue podría acelerar la transición del proyecto desde la fase de estudios hacia un plan de obra concreto. Por ello, la reglamentación será determinante para definir los tiempos y el volumen de inversión en el país.

Qué implicaría para Argentina la continuidad del proyecto de hidrógeno verde

La eventual concreción del proyecto de Fortescue en Río Negro tendría implicancias profundas para Argentina, tanto en términos económicos como ambientales y geopolíticos. El hidrógeno verde es considerado uno de los pilares de la descarbonización global, ya que permite reemplazar combustibles fósiles en industrias de alto consumo energético como transporte marítimo, siderurgia y química pesada. Si Argentina logra posicionarse como un exportador de hidrógeno verde, podría ingresar a un mercado que se proyecta como uno de los más relevantes del futuro. Además, el proyecto generaría miles de empleos directos e indirectos, promovería el desarrollo de proveedores locales y consolidaría a Río Negro como un polo estratégico en energías limpias. La empresa subrayó que el país tiene un potencial extraordinario gracias a la calidad de sus vientos y a su vasta extensión territorial, lo que permitiría desarrollar proyectos de gran escala. La continuidad de Fortescue en la región fortalece estas posibilidades, que dependen tanto de factores locales como de tendencias energéticas globales.

Descarbonización, innovación y el rol estratégico del hidrógeno verde en la agenda global

Fortescue recordó que uno de sus propósitos corporativos es avanzar en la descarbonización mundial mediante tecnologías limpias e innovaciones que permitan reducir de manera significativa las emisiones de gases de efecto invernadero. En este sentido, Argentina es vista como una plataforma privilegiada para desarrollar proyectos de hidrógeno verde gracias a su recurso eólico excepcional, especialmente en regiones patagónicas. La empresa también considera que estas iniciativas no solo impulsan la transición energética, sino que permiten diversificar la matriz económica de los países anfitriones, atraer nuevos perfiles de inversión y generar capacidades tecnológicas de alto nivel. Por ello, FFI mantiene su apuesta por el país mientras monitorea las condiciones económicas necesarias para avanzar hacia una fase de construcción. El potencial para descarbonizar sectores globales que hoy son difíciles de electrificar convierte al hidrógeno verde en una oportunidad histórica tanto para empresas como para gobiernos.

Por qué surgieron los rumores de cancelación del proyecto en Río Negro

El revuelo mediático surgió luego de declaraciones atribuidas a Andrea Confini, secretaria de Energía de Río Negro, publicadas en distintos medios que sugerían que la empresa australiana había devuelto las tierras asignadas y que el proyecto estaba cancelado de facto. Estas afirmaciones se interpretaron como una señal de salida definitiva, lo que rápidamente se viralizó en portales y redes, muchas veces sin contrastar la información. La falta de precisiones alimentó la confusión y llevó a suponer que el megaproyecto había fracasado. Sin embargo, Fortescue aseguró que la interpretación no fue correcta e insistió en que continúa trabajando en el país. Este episodio expone la necesidad de contar con información técnica y oficial antes de dar por concluido un proyecto de esta magnitud, especialmente cuando se trata de inversiones altamente complejas sujetas a regulaciones internacionales, estudios ambientales y condiciones económicas de largo plazo.

Qué pasos concretos está desarrollando Fortescue en la actualidad

Más allá del comunicado, la empresa sostuvo que continúa ejecutando tareas técnicas esenciales, como estudios de suelo, medición de vientos, análisis ambientales, relevamientos topográficos y diseño preliminar de ingeniería para el eventual parque eólico. Estas actividades requieren equipos especializados, presencia territorial y un presupuesto que solo tendría sentido si la firma efectivamente continúa interesada en avanzar. El proceso de medir el recurso eólico mediante mástiles instalados en zonas estratégicas es uno de los procedimientos más costosos y determinantes para proyectar un parque eólico a gran escala. La empresa también mantiene personal trabajando en Buenos Aires, enfocándose tanto en tareas administrativas como técnicas. Este nivel de actividad desmiente por completo la versión de abandono, especialmente porque empresas globales de energía verde no destinan recursos a proyectos que consideran inviables.

Cómo encaja este proyecto dentro del mercado mundial del hidrógeno y las energías renovables

El proyecto de hidrógeno verde en Río Negro forma parte de una estrategia global de Fortescue para posicionarse como líder mundial en la producción de energías limpias y vectores energéticos de cero emisiones. En un contexto en el que Europa, Asia y Estados Unidos impulsan con fuerza la transición hacia combustibles alternativos, el hidrógeno verde se perfila como uno de los recursos más demandados en los próximos 20 años. La posibilidad de que Argentina ingrese a este mercado depende de su capacidad para atraer inversiones y construir infraestructura energética y portuaria. La continuidad del proyecto de Fortescue, por tanto, es una oportunidad estratégica para que el país no quede relegado de la nueva economía del hidrógeno. Además, diversas consultoras internacionales estiman que los países del hemisferio sur, especialmente los de América Latina, podrían convertirse en proveedores claves debido a la disponibilidad de energías renovables baratas y abundantes.

El potencial de Río Negro dentro de la transición energética global

Río Negro es una provincia que ha comenzado a posicionarse en el mapa mundial gracias a sus recursos naturales y a su política energética orientada al desarrollo sostenible. El proyecto de Fortescue podría colocar a la región como un referente latinoamericano en energías limpias, generando oportunidades de empleo, capacitación, ciencia aplicada y desarrollo territorial. La ubicación estratégica del Parque Eólico Cerro Policía, sumada a la infraestructura de vientos patagónicos, permite desarrollar capacidades industriales que pocas regiones del mundo poseen. Además, la provincia podría beneficiarse de un efecto derrame económico significativo si el proyecto avanza a fases más avanzadas, incluyendo la radicación de empresas proveedoras, inversiones en caminos, ampliación de redes de energía y mejoras en infraestructura logística. En este sentido, la continuidad de Fortescue no es solo un proyecto empresarial, sino una oportunidad provincial e incluso nacional.

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