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Neuquén, 17 de febrero de 2025. Después de casi tres décadas, el Parque Nacional Lanín, ubicado en Neuquén, ha sido testigo de un acontecimiento trascendental para la conservación de la fauna argentina: el regreso del huemul (Hippocamelus bisulcus). Este ejemplar, monitorizado con un radiocollar, cruzó desde Chile hacia la zona de Queñi, marcando un hito en los esfuerzos por restaurar el hábitat natural de esta especie en peligro de extinción.
El regreso del huemul a esta área protegida es el resultado de una colaboración internacional entre la Administración de Parques Nacionales (APN) de Argentina y la Fundación Huilo Huilo de Chile. Ambos organismos, a través de un proyecto conjunto de conservación, han trabajado arduamente para mejorar las condiciones ambientales de la región transfronteriza que conecta ambos países, creando un corredor biológico natural favorable para la recolonización de esta especie emblemática.
El Proyecto de Conservación del Huemul, iniciado en 2005 por la Fundación Huilo Huilo, ha sido clave en la crianza y liberación de ejemplares en Chile, con la meta de restaurar las poblaciones de huemules en sus hábitats originales. Tras monitorear la dispersión de estos ejemplares hacia la frontera argentina, se activó el proyecto “Mejora del hábitat y abordaje de amenazas para la recolonización natural del huemul”, que incluye un exhaustivo seguimiento y control de fauna exótica para garantizar un entorno seguro para esta especie.
El paso de este huemul desde la región de Los Ríos, en Chile, hacia el Parque Nacional Lanín fue detectado por técnicos de la Reserva Biológica Huilo Huilo, quienes confirmaron su presencia en el área protegida argentina. Este evento no solo es un logro para la conservación, sino también una señal esperanzadora de que las políticas de protección ambiental interinstitucionales están dando frutos.
El huemul, declarado Monumento Natural en Argentina, había desaparecido de la región en las décadas de 1980 debido a la pérdida de hábitat y las amenazas de caza furtiva. Sin embargo, gracias a los esfuerzos compartidos por las instituciones argentinas y chilenas, el regreso de este emblemático animal representa un avance fundamental en la conservación de la biodiversidad andina.
Es importante destacar que, por el momento, el área de Queñi del Parque Nacional Lanín permanecerá cerrada al público para evitar alteraciones al entorno natural y garantizar la seguridad de la especie. Además, se recuerda a los visitantes que las mascotas no están permitidas en el parque.
Este hito resalta la importancia de la cooperación internacional en la protección de la fauna y la restauración de ecosistemas, y abre una nueva etapa en la lucha por preservar al huemul y otras especies en peligro. El regreso de este animal a las tierras argentinas es un símbolo de esperanza para la conservación de la biodiversidad de la región andina.
