Neuquen.-Las veterinarias funcionan con horario restringido y guardias durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio.
Por Ana Laura Calducci – calduccia@lmneuquen.com.ar
En las veterinarias, las consultas más frecuentes por estos días están relacionadas con los cambios de comportamiento de las mascotas y la preocupación por asegurarles el alimento. Es que, después de una semana de cuarentena, muchas familias empezaron a notar que el aislamiento afecta también a sus animalitos y ellos también necesitan de una provisión constante de comida y otros insumos, como el champú, que ahora están disponibles en horarios restringidos.
Para los animales, el aislamiento implica un cambio radical de la rutina. En los perros, aparecen signos de ansiedad y desesperación por descargar energía. Los gatos sufren la cercanía constante de sus amos y tienden a esconderse o dormir más. Eso confluye con que muchas peluquerías y comercios para mascotas cerraron por la emergencia. Los que siguen abiertos, funcionan con horario restringido y no más de dos clientes por vez. Las veterinarias, en tanto, recurrieron a las consultas telefónicas y sólo atienden personalmente las urgencias.
Por eso, al igual que con los humanos, hubo una oleada de compras compulsivas de alimentos para mascotas y se reforzaron los servicios de delivery. “Abrimos el feriado porque teníamos pedidos pendientes y cada vez eran más, como que la gente primero fue a los híper a abastecerse para la cuarentena y después se dio cuenta de que se olvidó del perro”, contó Mauro Catalá, de Wow Boutique. Comentó que también “aumentó mucho la venta de champú y elementos de higiene, porque ya no los pueden llevar a la peluquería y los bañan en casa”.
Luciano, de Punto Sur, indicó que muchos llaman porque su mascota está “aburrida” y no saben qué hacer. “A los perros los afecta cortarles automáticamente las salidas si estaban acostumbrados a correr afuera y llega el horario en el que empiezan a saltar; ahí es difícil que los más adultos aprendan una actividad nueva, pero podemos jugar más en casa”, aconsejó. Señaló que, con los gatos, “los que son caseros pueden sentirse invadidos y van a querer delimitar su espacio”. Agregó que, “con los que tenían una vida independiente afuera, que son los menos, hay que cuidar la higiene si los dejamos salir, porque no se contagian pero son vectores que pueden traer el virus en las patas”.
Otra consulta recurrente es si pueden sacarlos a pasear. El DNU no lo permite, sólo bajar a la vereda. Por ahora, el único alivio es asegurarles una nueva rutina bajo techo. “Es respetar los horarios, darles actividades y tratar de bajar la ansiedad; las mismas recomendaciones que cuando estamos con chicos”, resumió Mauro.
Qué pasa con los callejeros
El aislamiento obligatorio dejó sin agua ni comida a miles de perros callejeros de la ciudad, porque las personas que se encargaban de ellos ya no pueden salir de sus casas. Para que esos animales no queden abandonados a su suerte, algunos de los comerciantes del rubro están distribuyendo comida en esquinas puntuales. También hay un recorrido que organizó Zoonosis del Municipio.
Desde las organizaciones protectoras de animales, la recomendación para quienes cuidaban de un callejero es que no dejen de alimentarlos, sino que depositen la comida en la vereda, en lugar de ir hasta la plaza.
Cómo sacar al perro sin ponerse en riesgo
1- Salir solos con nuestro perro, no ir en grupos, dentro del horario habilitado de 9 a 20. Realizar el menor recorrido posible, no considerarlo un paseo.
2- Limpiar el suelo con lavandina al recolectar las heces y donde haya quedado orina de la mascota. Mantener la distancia con otros peatones y no tocar barandas ni mobiliario urbano.
3- Al regresar a casa, lavar las patas, correa y collar con agua y jabón. No usar alcohol o lavandina con la mascota, porque puede resecar la piel. Higienizar nuestras manos y cambiarnos la ropa de inmediato.
Por el aislamiento, hay menos urgencias veterinarias
El aislamiento de las mascotas en los hogares derivó en una fuerte caída de las consultas de urgencias en las veterinarias. Cayeron drásticamente los llamados por accidentes y traumatismos provocados por una pelea con otros animales.
Adolfo Abelli es dueño de la clínica veterinaria que lleva su apellido y se especializa en la atención de urgencias. Contó que, durante estos días de cuarentena, “lo primero que notamos es que bajaron mucho las consultas y tiene que ver con que las mascotas ya no están tanto en la calle”.
“La mayoría de los casos que se dan son por perros atropellados o que se lastimaron en una pelea y eso ahora se ve poco, sólo estamos teniendo algún viejito con un problema propio de esta época del año”, explicó.
Aclaró que la inactividad por el encierro no provoca cuadros de gravedad en las mascotas, más allá de la ansiedad por el cambio en horarios y rutinas.
“Sólo hay una situación que puede afectarlos mucho y es si quedan aislados solos en una casa, sin compañía ni de un humano ni de otro animal, porque ahí pueden desarrollar un trastorno obsesivo-compulsivo o TOC, como el de los humanos, que empieza con algunos tics que se vuelven permanentes”, advirtió.
Facundo, el veterinario de Wow, coincidió en que la demanda de urgencias bajó esta semana y lo que más atienden son consultas de rutina por teléfono. Aclaró que lo aconsejable “es no sacar de casa a nuestra mascota por un problema que se pueda resolver más adelante, como las vacunas o desparasitarlos, sino cuando hay un signo de alarma”.
El especialista detalló que se considera urgencia “si hay vómitos con sangre o de varios días, cualquier tipo de convulsión y dificultad respiratoria, accidentes o traumas que afecten órganos o haya fractura y afecciones en la piel intensas”. Añadió que, “en general, hay que estar más atentos si tenemos cachorros o el animal ya es viejito”.
Fuente: La Mañana Neuquén