Buenos Aires.-Autoridades de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación presentaron ayer en Casa de Gobierno un informe científico sobre las tendencias del cambio climático en el país, elaborado por expertos del Centro de Investigación del Mar y de la Atmósfera (CIMA), del que se desprende que la temperatura promedio aumentó en la mayor parte del país medio grado en los últimos 50 años.
El informe “Modelos Climáticos” consiste en una evaluación de las tendencias del clima del pasado reciente (desde la segunda mitad del siglo XX) y una proyección del clima futuro de la Argentina.
Se trata de la primera investigación científica que abarca los últimos cincuenta años en materia de cambio climático y refleja los primeros resultados de la Tercera Comunicación Nacional, que permite identificar que el aumento de la temperatura media en los últimos 50 años ha sido más alto en la Patagonia, llegando en algunas zonas a superar 1°C.
El fenómeno registrado se basa en la generalizada retirada de los glaciares existentes en esa región; al mismo tiempo que, en la mayor parte de la Argentina no patagónica, hubo un aumento de temperatura de hasta medio grado, un incremento menor al promedio global.
Estos aumentos de temperatura “no solo se deben al calentamiento global sino también a procesos internos del sistema climático como son los cambios en la circulación atmosférica que pueden exacerbar o morigerar regionalmente el impacto de tal calentamiento global”, señala el informe.
“En el centro del país hubo menor aumento de temperatura con incluso disminución en algunas zonas”, indica la investigación, y puntualiza que “la temperatura mínima tuvo mayores aumentos que la temperatura máxima, la que incluso tuvo disminuciones generalizadas en el centro del país”.
En tanto, la precipitación diaria máxima del año ha aumentado en casi todo el país, aunque solo en pocas zonas en forma significativa.
En diálogo con Télam, el secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable resumió que el informe abarcó todo el territorio nacional y que fueron utilizados veintiséis tipos de diagnóstico sobre las consecuencias del cambio climático en los próximos cien años en nuestro país.
“El estudio le sirve como herramienta de gestión tanto a los privados como al Estado Nacional, gobiernos provinciales y municipales, para trabajar sobre la posibilidad o eventualidad de inundaciones, desastres ecológicos, y fundamentalmente para prevenir a la gente de determinadas cuestiones que pueden afectar su vida normal”, explicó Lorusso.
Las conclusiones de dicho informe científico, que “todos nosotros imaginábamos y que vemos en forma permanente”, arrojan que “los efectos del cambio climático -el calentamiento global de la atmósfera y la falta de ozono- se va acelerando permanentemente, al igual que sus efectos no deseados”.
El documento servirá para elaborar la posición argentina ante la Cumbre del Clima que se llevará a cabo en diciembre en Francia, con el propósito de alcanzar un acuerdo superador al Protocolo de Kioto, firmado en 1997 en Japón por los países industrializados.
“Este estudio tiende a racionalizar la información que hemos podido procesar y decir en cada período qué clima vamos a tener. El cambio climático se trabaja con dos ejes centrales: adaptación y mitigación. Somos conscientes que mitigar, sobre todo en aquellos países que son grandes emisores, va a ser muy difícil, pese a que prometen que van a mitigar un montón”, señaló el secretario.
Y anticipó que desde Argentina “vamos a hacer una contribución directa de mitigación”, pero aún así el país debe “prepararse para este cambio climático, para el crecimiento geométrico de las dificultades que ocasiona el fenómeno, y fundamentalmente también para establecer relaciones con la población y las comunidades para que sepan a qué atenerse en el futuro”.
Juan Pablo Vismara, subsecretario de Promoción del Desarrollo Sustentable, explicó a Télam que las proyecciones “demuestran que hay una tendencia hacia los eventos meteorológicos extremos, como lluvias extremas con muchos milímetros en poco tiempo, u olas de calor muy fuerte. En algunas regiones hasta hay cambios en la frontera climática”.
Ante la consulta de Télam sobre la Cumbre del Clima en París, sostuvo que el informe “es un insumo fundamental para la posición argentina porque nos muestra cómo afecta el cambio climático a nuestro territorio. Como no somos un gran emisor, para nada, evidentemente somos víctimas de las emisiones de los países que vienen emitiendo gases de efecto invernadero desde la Revolución Industrial”.
“La posición argentina la va a llevar adelante la Cancillería por indicaciones de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y nosotros vamos a dar el apoyo técnico. Evidentemente, Argentina es un país que necesita seguir desarrollándose, porque todavía hay gente que debe seguir incluyéndose en la economía y en este proyecto de inclusión social. Por lo tanto, es evidente que vamos a seguir necesitando del consumo de la energía para crecer”, concluyó.
Fuente: TELAM