En su exposición, Aranguren dijo que “hay que salir de un sistema esquizofrénico para volver a ser normales, porque si no, no hay manera de invertir”.

El ministro sostuvo que la llegada de inversiones al país es una de las principales metas del gobierno de Mauricio Macri, al tiempo que deslizaba fuertes críticas contra la gestión en materia energética llevada adelante durante la gestión kirchnerista.

En este último marco, el ex presidente de Shell en Argentina afirmó que durante la administración anterior «se han aplicado prácticas discrecionales, como la falta de transparencia” y que durante es década “el sector energético ha escondido la basura debajo de la alfombra”.

También, Aranguren recordó que “Argentina era un país exportador” en el campo energético y que la producción de crudo cayó de 850 mil barriles en 1990 a 530 mil en la actualidad”.

A la vez recalcó que aunque “YPF se haya recuperado un poco con la producción no convencional, no es suficiente” por lo que “hay que abrirles el juego a otras empresas”.

Por último, manifestó que “en el sector energético hemos tenido una convertibilidad sin tomar en cuenta lo que pasaba afuera y los precios que se manejaban” por lo que hubo un “manejo irracional” de éstos, mientras que “los costos se han crecido de manera sostenida”.