En la región será el Bosque Andino Patagónico en las provincias de Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego.
Se busca contribuir al control de las inundaciones y las sequías, la recuperación de suelos salinos y la restauración de áreas incendiadas.
Veintitrés fueron los proyectos ganadores que se encargarán de restaurar 1.720 hectáreas de bosques nativos en zonas del norte y el sur del país, como parte del plan para recuperar unas 20 mil hectáreas de aquí al año 2023. Alrededor de unos 10 millones de árboles que buscarán contribuir al control de las inundaciones y las sequías, la recuperación de suelos salinos y la restauración de áreas incendiadas. Un guiño al mismo tiempo a la lucha contra el cambio climático, ya que los bosques atrapan y almacenan dióxido de carbono y contribuyen a mitigar el calentamiento global.
La iniciativa es parte de la plataforma de reforestación creada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable en el marco de ForestAr 2030. “Los últimos tres años logramos una reducción paulatina de la tasa de deforestación, pasamos de 600 mil hectáreas anuales a 150.000. Marca una tendencia que esperamos sostener, porque las estadísticas demuestran que es una de nuestras principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero”, sostuvo Diego Moreno, secretario de Política Ambiental en Recursos Naturales, durante la presentación en Casa de Gobierno.
La convocatoria estuvo abierta a instituciones públicas y privadas, organizaciones sociales, universidades y pymes. Los adjudicatarios de los 23 proyectos se ubican en tres sitios: la Cuenca Salí Dulce (Tucumán, Catamarca, Santiago del Estero), Monte y Espinal (Mendoza y San Luis) y Bosque Andino Patagónico (Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego), que se suman a las ocho experiencias de restauración que se encuentran vigentes en Chaco, Jujuy, Mendoza, Misiones, San Luis, Santiago del Estero, Buenos Aires y Chubut.
“Junto con las provincias desarrollamos mapas para definir los sitios prioritarios y elaboramos una red de contactos con instituciones públicas y privadas. Después de estas 1.700 hectáreas, queremos seguir impulsando muchas más para llegar a las 20.000 hectáreas anuales. Es importante la puesta en valor del potencial productivo de esos bosques”, agregó Moreno.
Fuente: Ámbito