Diputados aprobó proyecto para que empresas y usuarios generen energía renovable

En sesión especial, la Cámara de Diputados dio hoy media sanción al proyecto de ley que propone la creación de un “Régimen de Fomento a la Generación Distribuida de Energía Renovable”.

Con 159 votos a favor y 3 en contra y una abstención, el cuerpo giró al Senado la iniciativa para que los propios “usuarios generadores” de energías renovables, ya sea individuos o empresas, puedan abastecer a la red eléctrica pública a partir de los excedentes que produzcan con los equipamientos que dispongan.

El texto llegó al recinto con un amplio consenso desde la comisión de Energía y de Presupuesto, donde se trabajó en un proyecto que combinó las propuestas de los diputados Nicolás Tomassi (Bloque Justicialista), Juan Carlos Villalonga (Cambiemos), Luis María Bardeggia (PJ- FpV), Jorge Taboada (Chubut somos todos) y Gustavo Bevilacqua (UNA), entre otros.

Tal como adelantó Cronista.com, la normativa contiene 41 artículos a través de los cuales se fijan las políticas y se establecen «las condiciones jurídicas y contractuales para la generación de energía eléctrica de origen renovable por parte de usuarios de la red de distribución». En otras palabras, permite que cualquier usuario produzca su propia electricidad a partir de cualquiera de las fuentes renovables, y en el caso de que genere más cantidad de energía de la que consume, le venda ese excedente a la distribuidora (Edenor y Edesur en el AMBA o Epec en Córdoba, por ejemplo).

El proyecto también prevé que, a partir de la reglamentación de la ley (en el caso de que la apruebe también el Senado), cualquier proyecto de construcción de edificios públicos «deberá contemplar la utilización de algún sistema de generación distribuida proveniente de fuentes renovables».

Las políticas de incentivos para que los usuarios efectivamente instalen equipamiento que permita producir electricidad serán implementadas a través del Fondo para la Generación Distribuida de Energías Renovables (FODIS), creado a través del artículo 16, al que el Tesoro Nacional le destinará en el primer año un monto de $500 millones de pesos. El FODIS podrá proveer fondos y otorgar facilidades a través de préstamos, bonificar o subsidiar la tasa de interés de créditos, otorgar incentivos a la inyección o bonificaciones a la adquisición de sistemas de generación, o incluso financiar la difusión, investigación y desarrollo relacionadas a las posibles aplicaciones de este tipo de tecnologías.

Voces a favor y en contra

El miembro informante del Frente para la Victoria y presidente de la comisión de Energía, Julio De Vido, destacó que el proyecto “fue fruto de un arduo trabajo entre todos los bloques para unificar y sintetizar las distintas visiones sobre la incorporación de generación de energía distribuida”.

Según señaló, este paso adelante “marca la continuidad con las iniciativas para desarrollar las energías renovables que impulsaron tanto el presidente Néstor Kirchner como la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a partir del 2004”.

El salteño Pablo Kosiner (Bloque Justicialista) explicó que el dictamen original avasallaba “la competencia indelegable por parte de las provincias de legislar todo lo referente a la relación usuario-distribuidor”, pero comprometió el apoyo de su bancada tras mencionar que se aceptaron modificaciones a la propuesta.

Por el Frente Izquierda, Pablo López fundamentó su rechazo al advertir que “en nombre del cuidado del medio ambiente” se encubren una cantidad de subsidios a “grandes empresas”.

“En nombre de las energías renovables y del cuidado del medio ambiente, se incorpora una enorme cantidad de beneficios, que aunque se presenten como beneficios para viviendas unifamiliares o pequeñas empresas pueden ir a grandes empresas”, subrayó el legislador del Partido Obrero.

En su intervención, el diputado macrista Juan Carlos Villalonga remarcó que este sistema de generación distribuida en base a fuentes renovables “tiene grandes atributos” como por ejemplo “la eficiencia” y la “sencillez tecnológica”.

“Con esta ley nace un nuevo derecho que es el derechos de los usuarios a ser generadores de electricidad”, ponderó el legislador del PRO, uno de los autores del proyecto.