Córdoba.-Un suizo donará dinero para la compra de tierras en los bañados de Mar Chiquita. También aportó recursos para adquirir parte de la estancia Pinas, en Traslasierra.
La creación del tercer parque nacional en territorio cordobés parece haber dado un paso clave. Están asegurados ya los fondos necesarios para la compra o expropiación de una porción importante de los campos que rodean a la laguna Mar Chiquita, donde se asentará.
Lo que falta es que la ley de creación sea aprobada en el Congreso, donde ya tiene dictámenes favorables en Diputados y en el Senado, y que se definan algunos aspectos técnicos, legales y económicos pendientes.
Parque Nacional Ansenuza es el nombre elegido. Será el tercero en Córdoba, detrás del Parque Nacional Quebrada del Condorito (creado hace más de 20 años) y del Parque Nacional Traslasierra (aprobado este año y aún no abierto al público, sobre tierras de la estancia Pinas, en el oeste provincial).
La principal novedad es que se confirmó el donante de los fondos con que se pondría en marcha la operación. Como en otros parques nacionales del mundo, se trata de recursos aportados por filántropos a través de fundaciones que tienen por objetivo la conservación de santuarios naturales que quedan en pie.En este caso –según adelantaron a La Voz fuentes ligadas al proceso– se trata de Hansjörg Wyss, un suizo radicado en Estados Unidos, quien ya fue el aportante de los 3,7 millones de dólares con que se compraron 27 mil hectáreas de la estancia Pinas, ya transferidas al Estado nacional.
El monto del aporte para Mar Chiquita se confirmaría en los próximos días, pero será superior al efectuado para el parque de Traslasierra.
Las gestiones para asegurar los recursos avanzaron a través de la Conservation Land Trust (CLT), la fundación creada por el fallecido magnate Douglas Tompkins, que ya aportó millonarios recursos para la creación de parques nacionales en Argentina y Chile. Wyss, amigo personal de Tompkins, se sumó a esa tarea. Un rol clave juega en ese sentido la bióloga argentina Sofía Heinonen, directora ejecutiva de CLT.
Este año, los aportes de Wyss tendrán en Argentina dos destinos para futuros parques nacionales: el de Mar Chiquita en Córdoba y el del cerro Aconquija en Tucumán.
Lo que falta
El proceso para la creación del nuevo parque nacional en Córdoba es trabajado por los gobiernos de la Provincia y de la Nación, más la Fundación Aves Argentinas. Se suma la tarea en las comisiones de Ambiente del Senado y de Diputados.
Fuentes que trabajan directamente en ese proceso precisaron que está en elaboración el mapa del futuro parque. Resta definir qué sector será parque nacional (territorio de conservación plena, sin otro uso, y de propiedad estatal) y cuáles quedarían como reserva nacional (de propiedad privada, pero sin permitir urbanizaciones, actividad industrial ni desmonte, y con regulación para uso agrícola y ganadero).
No todo el contorno de la laguna será parque nacional. Un limite son los costos: el Estado nacional avala el proceso, pero no cuenta con recursos para las expropiaciones, al menos en una primera etapa.
De allí que se privilegiaría con la compra inicial el área norte de la gigante laguna, donde se ubican los bañados del río Dulce. Esa área, que combina terrenos privados y fiscales, concentra la mayor riqueza en materia de biodiversidad.
Está definido que las costas de uso urbano, como la localidad de Miramar, no quedarán dentro del parque. Y hay áreas de alto valor natural en las costas sur, este y oeste, que serían reservas. Por ejemplo, las desembocaduras de los ríos Primero y Segundo.
Sobre la laguna en sí, en tanto, resta acordar si la Provincia la transferirá a la Nación o si la mantendrá en su jurisdicción como reserva provincial con uso regulado.
“El mapa está ahora en su evaluación final. Es una de las precisiones que faltan”, se explicó.
El modelo que se viene trabajando, con apoyo de la CLT, es el de los Esteros del Iberá (en Corrientes), también un humedal con características similares a los bañados de “la mar” cordobesa. Para Iberá, que será parque nacional en breve, fueron claves también las donaciones de tierras que compró Tompkins con ese fin.
Impacto turístico regional
También se creó recientemente la Comisión de Intendentes, con 13 jefes comunales de la zona vinculada a la laguna Mar Chiquita. El pasado fin de semana, participaron, junto al equipo de trabajo del Parque Nacional Ansenuza, de una visita al flamante Parque Nacional Iberá.
“La idea es que vean ese modelo de gestión sustentable y el impacto que tiene en los lugareños y en los pueblos cercanos la actividad turística que representa un parque nacional”, contó uno de los promotores del recorrido. En esa actividad participó también la diputada nacional cordobesa Adriana Nazario.
En el caso de Mar Chiquita, el principal atractivo para el turismo mundial es la enorme cantidad y variedad de aves que la habitan. De hecho, ya es un sitio internacional reconocido en ese sentido.
En el caso del Parque Nacional Traslasierra, la donación de Wyss sirvió para el paso clave: la compra para el Estado de 27.169 hectáreas, de las 105 mil que tendría ese parque en el oeste del mapa cordobés.
El extranjero que ya donó en Córdoba
Por ahora, lo que el Estado no compró se transformará en reserva nacional, al menos hasta que aparezcan nuevos aportes privados o fondos oficiales para sumar expropiaciones.
Pinas, en el oeste cordobés, representa un reducto casi único de conservación del bosque nativo original que dominó esa región cordobesa.
Wyss ya donó al Estado argentino más de 500 mil hectáreas en la zona de la Patagonia, que compró para asegurarlas como reservas naturales. Algo similar hizo en otros países.
El suizo tiene 82 años y vive en Estados Unidos, donde fundó Synthes, compañía dedicada a fabricar tornillos y placas metálicas para la industria médica. Es uno de los más ricos empresarios de ese país.
Paraíso natural. La laguna Mar Chiquita es un humedal con una enorme riqueza en fauna y flora, única en el mundo. (Gentileza Cristian Juárez)
Pequeña gran ayuda de dos amigos millonarios
Luego de la Patagonia, los Esteros del Iberá y el Impenetrable Chaqueño, la provincia de Córdoba se sumó a la lista de territorios argentinos que recibirán ayuda económica de dos conocidos ecomillonarios para poder hacer realidad sus dos nuevos parques nacionales: Traslasierra y Mar Chiquita y Bañados del Río Dulce.
El suizo Hansjörg Wyss y la estadounidense Kristine McDivitt (foto), viuda del también multimillonario Douglas Tompkins, son dos de los principales benefactores de estos nuevos espacios protegidos que albergará la provincia.
Aunque el “viejo” Parque Nacional Quebrada del Condorito, creado hace 22 años, nunca terminó de levantar cabeza desde el punto de vista de la infraestructura y de la inversión que requiere como reserva natural y como paseo turístico, ahora este flujo internacional de fondos asegura, al menos, que otras dos valiosas áreas naturales permanezcan bajo cuidado del Estado.
Según la información oficial, Wyss aportó 3,7 millones de dólares para comprar 27 mil de las 105 mil hectáreas que deberá tener el Parque Nacional Traslasierra, por organizarse sobre la vieja estancia Pinas. Ahora, la fundación Conservation Land Trust, de McDivitt, hará también lo suyo y aportará los dólares necesarios para comenzar a concretar el parque del noreste provincial.