Así lo señala un informe del Grupo de Energías Renovables (GER), de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura, de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE). Los académicos también estiman como una meta de “difícil cumplimiento” que nuestro país genere un 8% de su energía de forma renovable para el año 2017, según lo establece la legislación.
Los investigadores Arturo Busso y Luis Vera, miembros del GER estiman que el plazo es demasiado corto para alcanzar ese porcentual de fuentes de energía aunque admiten que existen las condiciones y el conocimiento para diversificar la matriz con energías renovables. Hoy a nivel local, la falta de políticas concretas de promoción a este tipo de fuentes energéticas, vuele improbable el objetivo.
El Congreso de la Nación aprobó recientemente modificaciones a la Ley 26.190 de energías, con el objetivo de lograr que para el 2017 las energías limpias representen un 8 por ciento de la matriz eléctrica Argentina, para luego alcanzar un 20 por ciento en 2025.
Los profesionales observan como difícil el cumplimiento alcanzar ese porcentaje pero señalan que se debería aprovechar el nuevo contexto normativo para concretar proyectos de generación renovable en distintas escalas.