El gobernador Omar Gutiérrez destacó este miercoles la disminución en el uso de pirotecnia en la celebración de las fiestas de fin de año en Neuquén y se manifestó optimista respecto de que “en un futuro cercano lleguemos a la pirotecnia cero” en la provincia. “Esta campaña es de 24 horas, los 365 días”, aseveró.
“Si bien los resultados fueron evidentes e importantes, este camino recién comienza. Vamos a seguir trabajando fuertemente; es un cambio cultural y una cuestión de concientización y responsabilidad de toda la sociedad”, expresó.
Pidió a “todos aquellos que aún no han comprendido esto, que reflexionen”, y recordó que el Poder Ejecutivo reglamentó recientemente la ley provincial de Pirotecnia. En ese sentido, pidió a los municipios que adhieran a la normativa para “hacer todos causa común, defendiendo de la pirotecnia a los más pequeños, a los ancianos, a las personas con discapacidad y a las mascotas”.
“La provincia del Neuquén es de avanzada en esta temática. Aquí decimos y decidimos que queremos una provincia limpia y libre de pirotecnia, también de droga y alcohol; para así afianzar el desarrollo social de la mano del desarrollo de la cultura, del deporte, la educación, la salud, del trabajo, la producción y el turismo”, sostuvo el gobernador.
Agradeció también “a todos los que dejaron de vender pirotecnia y dejaron de consumir pirotecnia” y señaló que “se avanzó mucho pero hay mucho más por avanzar”.
En noviembre pasado, el gobernador firmó el decreto de reglamentación de la Ley 2833 de Pirotecnia, norma que prohíbe en todo el territorio de la provincia la utilización, tenencia, acopio, exhibición, fabricación y expendio al público de artificios de pirotecnia y cohetería, sean estos de venta libre o no y/o de fabricación autorizada.
A través del mismo, el Poder Ejecutivo establece que será el ministerio de Ciudadanía el organismo competente para ejercer la autoridad de aplicación de la Ley.
Desde esa cartera, se indicó que la pirotecnia “es un eje fundamental en la agenda ministerial, ya que son múltiples y variados los agentes que se ven perjudicados a causa de la misma, mencionando entre ellos a los adultos mayores, enfermos cardíacos, personas con discapacidades cognitivas o neurológicas que no comprenden la causa de las explosiones, tales como Síndrome de Down, Asperger, y otras, bebés y niños con mayor sensibilidad auditiva, niños que padecen Trastornos del Espectro Autista y Trastornos Generalizados del Desarrollo (TEA y TGD), como así también para los animales y el medio ambiente, a fin de lograr una mejor convivencia social”.
Fuente: Neuquén Informa