La Escuela Secundaria Técnica N° 1 de Carlos Tejedor instaló un aerogenerador para completar el plan de implementación de energías renovables que comenzó con la colocación de paneles solares fotovoltaicos y termosolares.

La nueva incorporación consta de un aerogenerador que convierte la energía cinética del viento en energía mecánica a través de una hélice, y en energía eléctrica gracias a un alternador; y dos paneles solares que proveen electricidad y agua caliente sanitaria al establecimiento.

Dafne Aguilar, directora de Medio Ambiente del Municipio de Carlos Tejedor, sostiene que “la idea es obtener energía eléctrica a través de las energías renovables, y colocarlo en centros educativos para que sirva como idea motivadora para otras organizaciones o institutos, y se fomenten las buenas prácticas del cuidado ambiental“.

En esa línea, la funcionaria explicó que se denominan “energías limpias” porque “no necesitan fuentes de combustible fósil, sino que simplemente la energía eólica va al transformador para generar energía eléctrica, por lo que no generan ningún tipo de contaminación”.

Además, el ex director de Medio Ambiente y actual presidente de la Cooperativa Eléctrica tejedorense, Luciano Dominguez, explicó que “el aerogenerador produce energía que se almacena en unas baterías y abastece a la bomba presurizadora de agua en caso de un corte del suministro de agua durante dos horas”.

“Los paneles solares generan e inyectan energía a la red, a modo de prueba, para ver cómo es el balance en vistas de la nueva Ley que se aprobó a nivel nacional, que permite que los pequeños usuarios domiciliarios generen energía”, explicó Dominguez, refiriéndose a la Ley 27.424 promulgada a fines del año pasado.

La Ley de Régimen de Fomento a la Generación Distribuida de Energías Renovables integradas a la Red Pública, resultó de una combinación de normativas presentadas por los diputados del peronismo, massismo y del frente oficialista.

El presidente de la CLECT explicó que se trata del fondo nacional que establece la normativa, que se gestionó desde el Municipio, y concluyó: “Es un proyecto de tecnología de investigación, por eso se pone en una escuela: ahí los chicos lo pueden conocer, estudiar y aprender”.