MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

Los barcos autónomos que son el futuro de la navegación marítima

El futuro de la navegación marítima está dando un giro hacia la ciencia ficción con la llegada de los barcos transoceánicos sin tripulación. Esta visión innovadora se está haciendo realidad antes de lo esperado, con un ejemplo destacado en los fiordos noruegos, donde un imponente barco de color verde limón está poniendo a prueba su navegación autónoma.

El barco, parte de la nueva flota de Ocean Infinity, es un claro ejemplo de la próxima generación de embarcaciones: equipado con tecnología de punta, desde cámaras y micrófonos hasta radares y comunicaciones por satélite, este barco robótico está redefiniendo los límites de la navegación marítima.

A pesar de sus 78 metros de eslora, sorprendentemente solo requiere 16 personas a bordo, una fracción de la tripulación necesaria en un barco tradicional para realizar las mismas tareas.

El corazón de esta revolución está en tierra firme, en los centros de operaciones remotas, como el de Ocean Infinity en Southampton, Inglaterra. Aquí, operadores equipados con controles de videojuegos y pantallas táctiles supervisan la actividad en tiempo real del barco a través de cámaras y sensores, demostrando el poder de la navegación marítima controlada a distancia.

La autonomía, la robótica y el funcionamiento remoto, junto con la inteligencia artificial, están transformando el sector marítimo a nivel global. Desde Noruega hasta China, pasando por Bélgica y Japón, experimentos con barcos autónomos y operados de forma remota están demostrando su eficacia y sus ventajas. Con menos personal a bordo, estos barcos pueden ser más pequeños, más eficientes en términos de combustible y más respetuosos con el medio ambiente.

Sin embargo, con esta innovación también surgen desafíos y preguntas importantes sobre la seguridad, la legislación y el futuro del trabajo en el sector marítimo. La Organización Marítima Internacional (OMI) está trabajando en códigos voluntarios para regular la autonomía en el mar, mientras que algunos países como el Reino Unido ya están considerando la incorporación de capitanes remotos en su legislación marítima.

FUENTE:BBC.