Un proceso ambiental decisivo que podría cambiar el futuro minero del centro-sur rionegrino
Los Menucos, Rio Negro, 17 de noviembre de 2025. En los últimos días se desarrolló un nuevo muestreo participativo de aguas en el proyecto de exploración minera Caltrauna, ubicado estratégicamente en el centro sur de Río Negro, a pocos kilómetros de Los Menucos y Aguada de Guerra. Este procedimiento, que forma parte de las obligaciones establecidas en el Código de Procedimientos Mineros, despierta un creciente interés público debido a la importancia que posee para el control ambiental, la protección de los recursos hídricos y la evolución de un proyecto minero que podría transformar el desarrollo económico y productivo de la región. En un contexto donde el agua se ha convertido en un recurso estratégico para las comunidades, conocer cómo avanza cada etapa del monitoreo genera expectativas y también interrogantes, especialmente cuando se trata de actividades ligadas a la exploración de plata y oro, una combinación que históricamente ha sido asociada tanto a oportunidades como a riesgos que deben ser transparentados.
¿Qué es el muestreo participativo y por qué genera tanta expectativa en Río Negro?
El segundo muestreo participativo de aguas desarrollado en Caltrauna forma parte de un mecanismo de control que busca asegurar que todas las actividades exploratorias se lleven adelante con la máxima transparencia y con participación institucional y comunitaria. Este modelo, considerado uno de los más completos en materia de control ambiental minero, incluye monitoreos “antes”, “durante” y “después” de las perforaciones exploratorias. En esta ocasión se ejecutó la fase correspondiente al período “durante”, una instancia clave en la cual se analizan posibles impactos directos asociados a los trabajos de perforación. Para muchas comunidades rurales, la realización de estos muestreos representa un instrumento fundamental para garantizar que la actividad minera no comprometa sus fuentes de agua ni afecte negativamente su modo de vida, por lo que cada avance es seguido con atención, especialmente cuando participa un abanico amplio de organismos técnicos y actores locales.
Participación institucional, comunitaria y técnica: un control plural cada vez más demandado
El muestreo contó con la participación activa de organismos provinciales, instituciones locales, consultoras técnicas y representantes de la empresa minera a cargo de la exploración. Entre ellos estuvieron presentes la Secretaría de Minería de Río Negro, la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático, el Departamento Provincial de Aguas (DPA), la Defensoría del Pueblo, autoridades municipales de Los Menucos, la Comisión de Fomento de Aguada de Guerra, superficiarios de los campos, profesionales de GPA Consultoría Ambiental y Social S.A.S. y personal de la compañía Minera Pedernales S.A. Esta diversidad de actores no solo garantiza pluralidad en el control y la toma de muestras, sino que fortalece la confianza pública en un momento donde los proyectos mineros exigen niveles crecientes de supervisión social. La presencia simultánea de organismos de control, autoridades políticas, técnicos especializados y ciudadanos del territorio cumple un rol esencial en la construcción de credibilidad y en el cumplimiento de estándares ambientales transparentes.
Resultados preliminares: la importancia de revisar los datos del primer muestreo
Antes de iniciar el recorrido de campo, las autoridades y consultoras presentaron los resultados del primer muestreo desarrollado en septiembre. Esta instancia preliminar permitió aclarar dudas sobre la metodología empleada, los parámetros analizados y los alcances de la campaña de perforación. La entrega de material informativo a los participantes refuerza el enfoque de acceso público a los datos, algo cada vez más solicitado en contextos donde la minería requiere construir legitimidad social. La revisión comparada entre muestreos se vuelve fundamental para comprender la evolución de las variables físico-químicas y bacteriológicas de las fuentes de agua monitoreadas. Si bien los resultados finales de este segundo muestreo todavía deben ser procesados en laboratorio, la presentación previa de los datos iniciales aporta un marco de referencia que permite evaluar si existen variaciones significativas durante el avance de las perforaciones exploratorias.
Cómo se tomaron las muestras: un proceso técnico que garantiza trazabilidad y control público
Durante el recorrido, se tomaron muestras de agua en tres puntos específicos del área vinculada al proyecto Caltrauna. Estas muestras fueron extraídas siguiendo protocolos estandarizados para análisis físico-químicos y bacteriológicos, todos ejecutados por la consultora especializada. A su vez, el Departamento Provincial de Aguas realizó contramuestras en cada punto, lo que asegura un sistema de control independiente y transparente. Este doble proceso aporta trazabilidad a los resultados, permitiendo verificar su validez frente a cualquier consulta posterior de autoridades, instituciones o la ciudadanía. Para muchos habitantes de la región, la confirmación de que estas prácticas se realizan con rigurosidad técnica es esencial para comprender el impacto real de la perforación exploratoria sobre los recursos hídricos locales, especialmente en un territorio donde la disponibilidad de agua superficial y subterránea es limitada y constituye un recurso prioritario para actividades productivas y ganaderas.
Avance de la campaña de perforación: los próximos pasos hasta diciembre
El proyecto Caltrauna se encuentra aún en una etapa inicial de exploración que contempla aproximadamente 1.500 metros de perforación distribuidos en cinco o seis sondeos. Según el cronograma, la campaña avanza con normalidad y se prevé su finalización durante los primeros días de diciembre. Los resultados de laboratorio obtenidos en el muestreo participativo deberán ser presentados dentro de los próximos 15 días ante la autoridad minera provincial. Este tipo de informes representa una pieza fundamental en la evaluación ambiental y técnica del proyecto, ya que permiten determinar si las perforaciones están generando alteraciones en el entorno o si los parámetros se mantienen dentro de los rangos esperados para una actividad exploratoria controlada. La evolución del proyecto dependerá en gran medida de estos análisis, que posteriormente formarán parte de los expedientes oficiales que definen su continuidad.
Cinco concesiones, un mismo objetivo: evaluar la presencia de plata y oro en la región
El proyecto Caltrauna abarca cinco concesiones mineras: Mina Caltrauna, Caltrauna Este, Caltrauna Oeste, Caltrauna Noroeste y Cateo Puesto Viejo. En conjunto, estas áreas buscan corroborar información geológica sobre posibles mineralizaciones de plata y oro mediante estudios geofísicos, geológicos y perforaciones controladas. La exploración de metales preciosos en esta zona del centro-sur de Río Negro podría tener implicancias económicas significativas, especialmente en lo que respecta a actividades productivas, generación de empleo y desarrollo de infraestructura. Sin embargo, también demanda una estricta supervisión ambiental que asegure que cualquier avance se concrete bajo estándares oficiales y con participación ciudadana. La geología del sector sugiere un potencial interés mineral, pero su confirmación dependerá de los análisis técnicos que actualmente se llevan adelante.
Buenas Prácticas Mineras y participación ciudadana: un modelo que busca equilibrio
Los monitoreos participativos se insertan en una política provincial basada en la Responsabilidad Social y las Buenas Prácticas Mineras, cuyo objetivo principal es garantizar instancias de participación, transparencia y control plural durante toda la vida del proyecto. Este enfoque intenta equilibrar el desarrollo minero con la protección del ambiente y los intereses de las comunidades locales. En un contexto donde la minería suele generar debates intensos, la implementación de mecanismos participativos es vista como una herramienta de diálogo y confianza, especialmente cuando se trata de proyectos vinculados a metales como oro y plata, que históricamente han exigido supervisión estricta. Para Río Negro, sostener estas prácticas resulta clave para posicionarse como una provincia que busca combinar desarrollo productivo y cuidado ambiental.
¿Qué impacto podría tener este proyecto en la región? Una mirada más amplia
Más allá del muestreo de aguas, el proyecto Caltrauna abre una serie de interrogantes sobre el potencial económico y ambiental de la zona. Las actividades mineras pueden generar empleo, inversión y desarrollo multiplicador en localidades que dependen mayoritariamente de la ganadería y actividades rurales. Sin embargo, también requieren procesos de control ambiental robustos que garanticen la preservación del suelo, la calidad del agua y la convivencia con actividades tradicionales. El muestreo participativo es una de las herramientas para asegurar que las perforaciones exploratorias se desarrollen sin generar impactos significativos, pero no es la única. De hecho, el monitoreo constante y la participación de instituciones independientes constituyen pilares centrales para evaluar el avance y la sostenibilidad del proyecto.
La importancia de la transparencia pública en proyectos mineros de plata y oro
En tiempos donde las comunidades exigen acceso inmediato a la información, la transparencia se ha convertido en un eje clave para el desarrollo de cualquier proyecto minero. Divulgar públicamente los resultados del muestreo participativo, informar sobre las técnicas utilizadas y detallar la evolución de la campaña exploratoria son estrategias fundamentales para generar confianza. La inclusión de múltiples organismos y vecinos en el proceso no solo fortalece la credibilidad, sino que democratiza el control ambiental. En el caso de Caltrauna, el nivel de participación institucional refleja una voluntad de garantizar que todas las etapas del proyecto sean supervisadas por entidades públicas y actores sociales con capacidad técnica para intervenir en cada decisión.
Próximos resultados y expectativas: ¿qué se espera del informe final?
Los resultados de laboratorio serán claves para evaluar el estado actual de las aguas en torno al proyecto. El informe incluirá parámetros como turbidez, conductividad, presencia de metales, pH, bacterias y otros indicadores fundamentales para determinar la calidad del agua durante la perforación. Si los valores se mantienen dentro de lo esperado, el proyecto podría avanzar a siguientes instancias exploratorias. Si se detectaran anomalías, las autoridades deberán profundizar los controles e implementar medidas preventivas o correctivas. Por eso, cada muestreo participativo se convierte en una pieza crucial dentro del rompecabezas ambiental que acompaña la exploración minera.
Andrés Nievas
Técnico en manejo ambiental, consultor Ambiental y escritor para medios locales e internacionales sobre temas de geopolitica y medio ambiente.





