Neuquén. En el Día Mundial del Medioambiente, la Municipalidad de Neuquén se prepara para reforzar las enseñanzas y los cambios de hábitos que generen una convivencia más amigable con el ecosistema que nos rodea. Aunque aseguran que cada vez son más los que separan los residuos en casa, aclaran que hay mucho por hacer para reducir el impacto de la vida humana sobre el planeta.

Silvia Gutiérrez, subsecretaria de Medio Ambiente del Municipio, aseguró que en los últimos años se vio un verdadero cambio de conciencia. “Hay quienes aún no se deciden a hacer la separación en origen, pero todos los neuquinos ya saben que en esta ciudad se separa la basura”, aseguró.

“No todas las ciudades de la provincia tienen un relleno sanitario, y nosotros además logramos procesarlo”, expresó la funcionaria, y agregó que esta reutilización genera una economía circular que permite que los materiales se inserten otra vez en el circuito productivo. Afirmó que el impacto es evidente: “Se generan 35 puestos de trabajo directos en el CAN, además de otros empleos indirectos que reutilizan los materiales, y se evita el consumo de energía y emisión de gases de efecto invernadero al evitar producir materiales nuevos”.

Hacer mella en la conciencia ambiental de la población depende, en muchos casos, del esfuerzo de la subsecretaría, que se concentra en los más jóvenes. “Hacemos charlas en escuelas y más de 3000 chicos visitaron el CAN para entender el proceso de reciclaje”, sostuvo Gutiérrez, y aclaró que también se organizan visitas a las áreas protegidas de la ciudad, como la laguna San Lorenzo o Parque Norte, para que los niños aprendan a valorar y cuidar la fauna y flora local.

Entre los grandes desafíos que plantea el ambiente neuquino se cuenta, por ejemplo, la superpoblación canina. Un censo realizado el año pasado dio cuenta de la presencia de al menos 10 mil perros sueltos en las calles. Sin embargo, Gutiérrez se mostró optimista al respecto: “El año pasado tuvimos un récord y llegamos a las 10 mil castraciones; a este paso, en unos años llegaremos a equilibrar la población canina y todos los perros tendrán su dueño”, afirmó.

La contaminación de los ríos es otra preocupación. La funcionaria aclaró que este verano se notaron muy buenos niveles de calidad de las aguas. De todos modos, los resultados de los estudios no fueron buenos en años previos y Gutiérrez aseguró que la capacidad del tratamiento de efluentes es limitada en la ciudad, por lo que se realizan monitoreos constantes para evaluar la calidad del recurso.