El obispo de Neuquén, monseñor Fernando Croxatto, exhortó a los fieles a una “conversión ecológica integral”, celebrandose este pasado 5 de junio el Día Mundial del Medio Ambiente, que este año llevará el lema “Sin contaminación por plásticos” y tendrá su celebración global en la India.
Mediante un video, el prelado destacó la importancia de esta jornada, sobre todo a partir de la exhortación Laudato si’ del papa Francisco. “Este llamado a una conversión ecológica, una conversión profunda donde podamos integrarnos, porque la degradación del ambiente también lleva a una degradación humana y la misma degradación humana también tiene resonancia en la degradación ambiental”, señaló.
El obispo advirtió que en el documento del Papa hay una pregunta de fondo: “¿Qué mundo queremos dejarle a los que vienen atrás nuestro, a los niños?”, y añadió que Francisco “nos invita también a hacernos otras preguntas más profundas: ¿Para qué estoy en este mundo? ¿Qué sentido tiene en mi historia? ¿Para qué trabajamos, para qué hacemos lo que hacemos?”. Estas son preguntas “que no podemos dejar de lado a la hora de pensarnos con este compromiso y con esta misión en nuestra querida Tierra, nuestra madre bella”, consideró.
“Qué lindo en este dia del medio ambiente volver a replantearnos algunas cuestiones: Cómo estoy usando el Medio Ambiente; cómo es mi relación con la creación; cómo trato a la naturaleza; cómo trato el espacio donde vivo, mi ambiente; de qué manera lo estamos cuidando; de qué manera lo estamos haciendo digno y lindo, no solo para mí sino para otros”, continuó el obispo.
Monseñor Croxatto señaló que uno de los riesgos y errores es el egoísmo y la autorreferencialidad, “que a veces llevan a muchas otras actitudes, que no solamente tienen que ver con el ambiente”.
También advirtió sobre la explotación de los bienes de la naturaleza, y aclaró que no son recursos porque “al recurso lo uso, al bien lo cuido”. El trasfondo de esta explotación, subrayó, es el capitalismo, la búsqueda del rédito personal, el descarte: ‘uso y tiro’ que “esconde un egoísmo de pensar la vida para mí y no para los otros”.
“Qué lindo seria recuperar el ser agradecidos, porque todo lo hemos recibido, el don de la vida y el don de la creación”, deseó el obispo, e invitó en este Día del Medio Ambiente “a pensarnos en nuestro propio ambiente: Cómo lo tratamos, cómo hacer más digno y más sano el lugar donde vivimos”.