Ingeniero Jacobacci, Rio Negro, 29 de mayo de 2025. Río Negro, una de las provincias más deslumbrantes de la Patagonia argentina, está protagonizando un cambio paradigmático en el turismo nacional: una transformación silenciosa pero poderosa que convierte sus paisajes, cultura y comunidades en ejemplos vivos de turismo sostenible. Lejos del modelo extractivista que agotó destinos en otras regiones, Río Negro invierte en un desarrollo equilibrado, integrando el cuidado ambiental, la inclusión social y el crecimiento económico local. ¿Qué está haciendo la provincia para posicionarse como líder en esta tendencia global? La respuesta es tan estratégica como inspiradora.
Desde el corazón de la Región Sur hasta la imponente costa atlántica, los municipios rionegrinos están implementando programas de gestión integral del turismo sostenible, con el respaldo técnico del Sistema Argentino de Calidad Turística (SACT) y el impulso de la Secretaría de Turismo de la Nación. En este marco, localidades como Ingeniero Jacobacci, Comallo, El Bolsón y San Antonio Oeste avanzan en la elaboración de planes estratégicos que priorizan la calidad, la sustentabilidad y el arraigo cultural como pilares de su oferta turística.
Estos planes incluyen desde circuitos ecoturísticos autoguiados, hasta capacitaciones en turismo responsable para prestadores locales, pasando por la creación de productos turísticos de base comunitaria que revalorizan los saberes ancestrales y los productos regionales.
Municipios que marcan el rumbo: el caso de Jacobacci y Comallo
Uno de los avances más significativos se dio en la segunda asistencia técnica del programa “Bases para la Gestión Integral de Municipios Turísticos Sostenibles”, donde Jacobacci y Comallo expusieron sus planes de mejora y metas a corto y mediano plazo. En ambos casos, se identificaron áreas clave de intervención, como la necesidad de señalética interpretativa, mejoras en accesibilidad y articulación entre actores públicos y privados.
Este trabajo colaborativo no solo fortalece las capacidades institucionales locales, sino que abre la puerta a financiamiento nacional e internacional, al posicionar a estos destinos como modelos de gobernanza turística.
¿Qué busca el turista sostenible? Río Negro responde a una nueva demanda global
Hoy el turista ya no solo busca descanso o aventura. Busca conexión, autenticidad, impacto positivo. Y ahí es donde Río Negro encuentra su ventaja competitiva. Con un enfoque basado en la experiencia local, la provincia promueve visitas a áreas naturales protegidas, ferias de productores, talleres de oficios tradicionales y proyectos agroecológicos, creando un tejido de experiencias inmersivas con bajo impacto ambiental.
Bariloche, El Bolsón, Choele Choel y Sierra Grande, entre otras, son ejemplos de ciudades que han integrado estos valores en sus planes de desarrollo. Además, el enfoque regional permite conectar circuitos y fomentar la descentralización del turismo, un objetivo clave para evitar la saturación de destinos icónicos.
Una política pública con enfoque de triple impacto: ambiental, social y económico
El modelo de turismo sostenible que Río Negro promueve no solo reduce la huella de carbono de la actividad, sino que impulsa el empleo genuino, fomenta el arraigo joven y contribuye a la conservación de los ecosistemas. En tiempos de crisis climática, estas políticas adquieren una relevancia estratégica para el país.
Según estudios del Ministerio de Turismo y Deportes, los destinos que aplican criterios de sostenibilidad logran mejor reputación online, mayor permanencia del turista y mejor distribución del ingreso local. Es decir: el turismo sostenible no es solo una moda, sino una inversión inteligente.
Estrategias de promoción digital y alianzas estratégicas
Conscientes de la importancia del posicionamiento digital, desde la provincia se trabaja en campañas específicas de promoción de turismo sostenible en redes sociales, con el objetivo de llegar a un público nacional e internacional que valora el turismo responsable. Asimismo, se están forjando alianzas con operadores turísticos, embajadas y cámaras de comercio para ampliar el alcance y lograr una mayor captación de visitantes alineados con estos valores.
Además, se recomienda a prestadores y municipios incorporar prácticas como el uso de datos estructurados (Schema.org) en sus sitios web, optimización para SEO local, y contenido multimedia con textos alternativos accesibles, lo que mejora el rendimiento en motores de búsqueda y garantiza una mejor experiencia de usuario.
¿Cómo medir el impacto real del turismo sostenible?
Para garantizar que las acciones no se queden en el discurso, el programa implementa indicadores de evaluación continua, que permiten monitorear la evolución de los destinos en términos de calidad, satisfacción del visitante y sostenibilidad ambiental. Estos datos son fundamentales para acceder a fondos y proyectar nuevas inversiones, sobre todo en infraestructura verde y capacitación técnica.
Un aspecto clave es la participación activa de las comunidades locales en la planificación turística. Lejos de ser receptores pasivos, los habitantes de las localidades son protagonistas del proceso. Ya sea a través de cooperativas, asociaciones culturales o emprendimientos familiares, el turismo sostenible genera oportunidades y fortalece el tejido social.
En este sentido, el programa también pone énfasis en la formación de promotores ambientales y guías locales, quienes cumplen un rol fundamental en la educación ambiental del visitante y la interpretación del territorio.
¿Puede Río Negro liderar el turismo sostenible del futuro?
Con políticas claras, objetivos medibles y una comunidad comprometida, todo indica que sí. La experiencia acumulada por la provincia, sumada a su diversidad de paisajes, hace que esté cada vez más cerca de convertirse en un caso de éxito replicable a nivel nacional e incluso internacional.
No es casualidad que organismos como el INPROTUR y el Consejo Federal de Turismo miren con atención lo que sucede en Río Negro, ni que cada vez más influencers, blogueros y medios especializados incluyan a la provincia en sus rankings de destinos sostenibles.
El ejemplo de Río Negro demuestra que es posible conjugar crecimiento turístico con respeto ambiental y justicia social. En un mundo que exige nuevas formas de viajar, la provincia ofrece una hoja de ruta basada en valores, planificación y acción colectiva. Si otras regiones siguen este camino, el turismo puede convertirse —realmente— en una herramienta para transformar el presente y proteger el futuro.