MONITOREO Y ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN GEOPOLÍTICA EN EL MUNDO Y SU IMPLICANCIA EN LA PATAGONIA

Una misión al centro de la Tierra para ver una nueva capa

Un grupo de investigadores planea taladrar el manto terrestre, una capa de 2900 kilómetros de grosor donde predominan materiales como los silicatos, para examinar su composición, acceder a la vida microbiana en las profundidades y estudiar el movimiento de las placas tectónicas para comprender el mecanismo de los terremotos.

Como la corteza terrestre es aproximadamente el doble de gruesa en el suelo continental que bajo el océano, se determinó avanzar por vía submarina. La encargada de esta gesta es la Agencia Japonesa para la Ciencia y Tecnología Marítimo-Terrestre (Jamstec), a quienes se suman expertos de Estados Unidos y Europa. El inicio de las labores está previsto para 2025, pero no confían alcanzar el manto terrestre hasta 2030. La misión ya sufrió varios retrasos.

Para establecer el mejor punto geográfico, Jamstec consideró el espesor y la temperatura de la corteza terrestre con un sistema de ondas sonoras que permite interpretar la estructura del subsuelo. Así, el lugar señalado es en inmediaciones del archipiélago de Hawai. También se barajan otros, uno en la zona costera de México y otro en la de Costa Rica. Para llegar al manto -a unos 7 kilómetros de profundidad- se recurrirá al Chikyu, un colosal buque japonés de perforación de aguas profundas. La nave tiene una enorme tubería de extracción similar a las de las plataformas petrolíferas en yacimientos marinos. Es capaz de succionar hasta 1200 toneladas del contenido que se halle en el manto terrestre.

“No sabemos exactamente cuál es la composición del manto, sólo hemos podido identificar algunos de los materiales que lo conforman. Se trata de una roca realmente hermosa, de un tono entre el verde y el amarillo”, sintetizó Natsue Abe, uno de los investigadores de Jamstec. Los expertos creen que la observación directa del manto revelará su dureza y cuánta agua hay en su interior, lo que permitiría entender mejor los movimientos de las placas tectónicas, causantes de terremotos. “En nuestro país tenemos volcanes, terremotos y una diversa variedad de amenazas naturales. Por eso, buscamos un tipo de monitoreo o análisis que permita anticipar estas catástrofes. Y para ello necesitamos observar directamente la Tierra”, explicó Abe.

El proceso de la gran expedición

El Chikyu

Un barco de investigación de bandera japonesa tiene la capacidad de perforar 7500 metros debajo del lecho marino. Utiliza un sistema de perforación con entubado, en el que el perforador bombea un lodo especial a presión para lubricar y equilibrar la presión.

Las cortezas

La capa oceánica tiene ocho kilómetros de profundidad promedio y es más delgada que la corteza continental. En el manto, las condiciones extremas de presión generan que la roca esté en un estado plástico. Hay corrientes de 600° a 3500 °C.

Fuente: https://www.lmneuquen.com/una-mision-al-centro-la-tierra-ver-una-nueva-capa-n599023