Evalúan variaciones en glaciares rionegrinos asociadas a cuestiones climáticas
RIO NEGRO.- Con el objetivo de estudiar uno de los componentes importantes del ciclo del agua en la región Andina, técnicos del Departamento Provincial de Aguas mide y estudia los glaciares rionegrinos.
Si bien estos glaciares se han hecho famosos por su belleza, la mayoría de las personas ignora que estas inmensas masas de hielo son cruciales en la naturaleza ya que contribuyen a regularlos caudales de los ríos que nacen en la cordillera. Por este motivo, los técnicos del DPA, los miden y estudian con el objetivo de poder evaluar sus variaciones asociadas a cuestiones climáticas.
En la Provincia de Río Negro se han identificado a la fecha, a través de imágenes satelitales, fotografías aéreas e inspecciones de campo, un total de 21 glaciares de variadas dimensiones.
En los últimos años, el retroceso de los glaciares ha sido una de las primeras alarmas respecto de los cambios climáticos a gran escala en el planeta, ya que al tratarse de cuerpos más sensibles son los primeros en sufrir las consecuencias.
En Río Negro, se cuenta con una importante cantidad de datos sobre el glaciar Hielo Azul que fueron recopilados por un reconocido glaciólogo de Bariloche, Sigfrido Rubulis.
Glaciar Hielo Azul
El glaciar Hielo Azul se ubica en la cuenca del Río Azul; extremo sudoeste de Río Negro y alimenta uno de sus afluentes, el arroyo El Teno.
El DPA realizó en 2011 la primera campaña de medición para determinar la ubicación actual del frente glaciar e identificar marcas de antiguas mediciones.
Llegar allí no es sencillo, para acceder al glaciar, se asciende a caballo durante medio día a lo largo de 13 kilómetros. El ascenso continúa a pie, unas tres horas, hasta los 1.700 metros sobre el nivel del mar donde se encuentra el frente del glaciar.
“El último tramo del camino es una riesgosa picada de montaña, donde se asciende por pedreros y zonas de rocas sueltas, lo que requiere buena condición física de los expedicionarios”, explican los expertos del organismo. Y agregan: “este arduo trabajo que se sigue realizando una vez al año, sirvió para llegar a la conclusión de que la distancia del frente glaciar con respecto a 1953 sufrió un fuerte retroceso de casi 600 metros; este proceso fue medianamente constante hasta el año 1995, a partir de allí la velocidad de retroceso aumentó significativamente”.
En los últimos años, este tipo de relevamiento se hace también en el Glaciar Perito Moreno cercano a El Bolsón.
En sus orígenes estas tareas se realizaban en conjunto con técnicos de la provincia de Neuquén lo que significó un gran avance para los organismos provinciales de gestión del agua en la Patagonia Norte, ya que la experiencia, la capacitación técnica del personal y la puesta a punto de metodologías de análisis demuestran la voluntad y la capacidad para conocer los recursos que son propios y ejercer la competencia de administrarlos.
Fuente: Gobierno de Río Negro
