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Gobierno argentino, renuente a identificar el 2 de abril con reclamo soberano de Malvinas

BUENOS AIRES.- El Gobierno de Argentina no es proclive a reivindicar el 2 de abril como fecha para recordar su reclamo sobre la soberanía de las islas Malvinas, un día que es festivo nacional en conmemoración de la guerra de 1982 contra Reino Unido por el control del archipiélago.

«El 2 de abril no es una fecha que promovamos celebrar», dijeron a Sputnik altos cargos de la Subsecretaría de las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los Espacios Marítimos Circundantes.

La razón es que Argentina no pretende reivindicar el uso de la fuerza para resolver el diferendo con Reino Unido, vigente desde que este país ocupara las islas en 1833, explicaron.

Más importantes serían otras fechas como el 3 de enero, «en la que hacemos actividades en el país y en nuestras embajadas porque fue cuando los británicos invadieron las islas», o el 10 de junio, «el aniversario de la creación de la comandancia político militar de las islas en 1829».

«Para nosotros, el 2 de abril no es una fecha que quisiéramos recordar, porque consideramos que fue una guerra injusta, declarada por un Gobierno ilegítimo (el de la dictadura argentina, bajo la presidencia de Leopoldo Galtieri) y en donde murieron muchos soldados de ambos bandos», reconocieron las autoridades.

El Gobierno de Mauricio Macri reclama la necesidad de abrir una instancia de conversaciones con Londres, «porque el diálogo es la única manera de llegar a la solución de cualquier conflicto, como la historia así lo demuestra».

«Este Gobierno está intentando retomar un diálogo que se había visto interrumpido durante la gestión anterior con Reino Unido para ver si a través de ese proceso se puede avanzar en algo», argumentaron los responsables, dependientes de cancillería.

Apuesta por conversar con Reino Unido

En un acercamiento sin precedentes desde 1999, Argentina y Reino Unido plasmaron ese diálogo en una declaración conjunta firmada en septiembre de 2016 por la canciller argentina Susana Malcorra y por el viceministro de Relaciones Exteriores británico Alan Duncan.

Buenos Aires y Londres expresaron, a través de ese acuerdo, su apoyo al proceso de identificación de los cuerpos de soldados argentinos caídos en el conflicto bélico de 1982.

Como resultado, un equipo técnico de 10 forenses liderado por la Cruz Roja, entre los que habrá dos argentinos y dos británicos, realizará las tareas de identificación entre junio y septiembre de este año, confirmaron las autoridades.

La Cruz Roja realizó hasta ahora dos misiones a las islas Malvinas, una en junio de 2016, y otra hace unas semanas, para explorar las condiciones en las que serán exhumados los restos de 123 soldados que están enterrados en el cementerio de Darwin.

«Se va a respetar la voluntad de cada familia, y hasta ahora, ninguna de las ochenta y pico familias que hemos entrevistado ha solicitado que los cuerpos retornen al país», informaron los altos cargos.

Hidrocarburos y pesca

En el comunicado conjunto, Duncan y Malcorra también se comprometieron a «adoptar las medidas apropiadas para remover todos los obstáculos que limitan el crecimiento económico y el desarrollo sustentable de las islas Malvinas, incluyendo comercio, pesca, navegación e hidrocarburos».

Pero el Gobierno argentino sostiene que ese asunto no ha sido retomado.

«Los ingleses propusieron hablar de hidrocarburos y pesca y nosotros dijimos que por ahora no», afirmaron las autoridades.

Si bien «se dijo que se iban a comenzar, por ahora no se han empezado, porque no hay interés de nuestra parte», añadieron.

Los altos cargos de la Subsecretaría consideraron que aquella declaración conjunta, que causó mucha controversia en Argentina, recibió «una publicidad exagerada».

Se trató «de una hoja de ruta que puso en el papel la intención de este Gobierno, acompañado en algunos aspectos por el británico, de abrir espacios de diálogo y de intentar avanzar en todos los temas que se puedan avanzar», dijeron desde la Subsecretaría.

Con respecto a las Malvinas, tanto el ministro británico de Relaciones Exteriores como la canciller argentina «reconocen la existencia de un conflicto de soberanía, y se establece que todo lo que se diga o se haga se hace bajo el paraguas de soberanía de los Tratados de Madrid».

En aquel acuerdo de 1990, Buenos Aires y Londres restablecieron sus relaciones diplomáticas.