Por Andrés Nievas.-El Presidente de nuestro vecino país, Bolivia, acaba de ser forzado a renunciar a su cargo, luego de haber ganado las elecciones presidenciales el jueves 20 de octubre de este año. ¿Fue acaso una Violación de la constitución o un autogolpe al enterarse que en realidad el perdía las elecciones y que se falsearon los resultados como afirmaron los medios internacionales? No lo parece.
Para quien sepa mirar entre líneas o ir al fondo de la cuestión, a pesar de la catarata de informaciones y contrainformaciones de los medios esto se parece a un golpe de estado contra Evo Morales con el ejército Boliviano como “punta de lanza” y sobre todo a partir de las declaraciones del presidente Norteamericano Donald Trump quien una vez renunciado Evo Morales declaro lo que
«Estos eventos envían una fuerte señal a los regímenes ilegítimos en Venezuela y Nicaragua de que la democracia siempre prevalecerá«[1]quien además felicito públicamente a esa fuerza.
Para entender lo que ha ocurrido en Bolivia debemos remitirnos a la vieja
Doctrina Monroe nacida en el gobierno del presidente norteamericano James Monroe en el año 1823, Siglo XIX. Esta doctrina marcaba el principio de la política exterior norteamericana resumida en la frase
«América para los americanos» según la cual cualquier avance de potencias europeas en América sería vista como un acto de agresión que requeriría la intervención de Estados Unidos. Doctrina que el presidente Donald Trump retomo en septiembre del 2018 en la Asamblea de la ONU
[2]donde afirmó que no permitirán la influencia de ninguna potencia extranjera en el continente nombrando a Kimberly Breier (quien en 2019 renuncio) como titular de la secretaria de asuntos para América Latina dependiente del Departamento de Estado, encargada de planificar todas las intervenciones en América Latina en todas las áreas de interés.
En realidad Estados Unidos no abandono esta línea ya que si miramos los hechos concretos siempre hubieron intervenciones norteamericanas en el continente de diversas formas y en las diferentes áreas como cuidado del medio ambiente, desastres naturales, narcotráfico, economía, militar etc., digan lo que digan los medios sino que la hicieron más agresiva y por ello ocurrió lo que ya sabemos en Bolivia.
Ese océano de información en distintos sentidos tiene el objetivo de distraer a la opinión pública de lo que realmente ocurrió y seguirá ocurriendo en ese país y justificar así futuras acciones. Independientemente de si Evo Morales hubiera formado y colocado un candidato a Presidente de su sector y el ir como vice o no para no desgastar su figura o no forzar la constitución y no llegar a la instancia del golpe, (Tal como hizo la formula Fernandez-Fernandez) el golpe en Bolivia lo podrían haber dado mucho antes porque ya habían cambios importantes a contramano de la Doctrina Monroe como cuando se expulsó a la USAID en 2013.
Con intervención el gobierno norteamericano se refiere al avance de potencias extranjeras sobre los recursos naturales y mercados en América Latina que son de interés de Estados Unidos. En el siglo XXI de sumaban a esa definición dos potencias más ante las cuales EEUU debía intervenir también: China y Rusia que equilibraban la presencia de poderes en la región las cuales han avanzado en las áreas militar, tecnológica, energía etc. Como pretexto o cobertura de dichas intervenciones Estados Unidos siempre ha utilizado y seguirá utilizando la misma: la violación a los derechos humanos, violación a la democracia, constitución etc. O sea imponen su democracia con golpes de estado.
Se trata de intervenir de la forma que sea y una manera podía ser mediante golpes de Estados sean encubiertos o no, cívico-militares, parlamentarios, da lo mismo, la cosa es cortar la expansión de potencias extranjeras en América Latina. Así han sido en el Siglo XXI los golpes contra Manuel Zelaya en 2009 Presidente de Honduras, Rafael Correa, Fernando Lugo en Paraguay, Dilma Roussef y ahora Evo Morales y pronto lo será contra Daniel Ortega Presidente de Nicaragua a quien Trump ya le largo una advertencia luego de lo ocurrido en Bolivia y ya explicamos en nota anterior porque a Nicolás Maduro no lograran sacarlo del poder mediante un golpe de estado.
Con el nacimiento de la doctrina Monroe nace el espacio geopolítico conocido como «patio trasero de EEUU» que si bien en ese momento de anunciar la doctrina Estados Unidos no era la potencia que es hoy y América estaba controlada por imperios europeos pero marco la política exterior en el siglo XX y XXI que todos sus presidentes norteamericanos fueron siguiendo al pie de la letra con diversas intervenciones. Formalmente se reparten esa zona luego de la Segunda Guerra Mundial en el pacto de Yalta entre los dos bloque del mundo bipolar. Esta doctrina aplica para todos los gobiernos de países que quieran ir en otra dirección. De otra manera nos quedaremos con verdades a medias que en realidad no lo son tanto y que quieren instalar medios alineados a Estados Unidos en todo el mundo que giran en torno la violación de la constitución, la democracia y los derechos humanos.
Ahora bien hecha esta introducción histórica proseguimos al tema central de esta nota ¿Cuál es el principal interés yanqui en Bolivia? Las reservas de Litio ubicadas en la zona conocida como el “Triangulo del Litio” formado por Bolivia (Salar de Uyuni), Chile (Salar de Atacama) y Argentina (salares de la puna Jujeña y Salteña, y norte de Catamarca) donde se encuentra el 80% de las reservas mundiales probadas de este metal blando. Este mineral anima la movilidad de los dispositivos eléctricos en todo el mundo: Un teléfono celular, una notebook, una tablet, se desplazan Gracias a la acumulación energética de las baterías Ion-litio; y sin ellas un satélite no entraría en órbita o una nave espacial no sobreviviría. O sea estamos hablando de un negocio de miles de millones de dólares y de tecnologías de punta.
La empresa en cuestión creada es
Yacimientos de Litio Bolivianos, decisión del Gobierno de Evo Morales para un proyecto nacional en alianza con empresas extranjeras de Alemania y Rusia pricnipalmente de fuera de nuestro continente, o sea Doctrina Monroe! Y ¿Cómo avanza Estados Unidos hacia estas reservas que en Bolivia están en manos de una empresa estatal? Estados Unidos avanza mediante el conflicto geopolítico apoyando encubiertamente el golpe de estado contra el Presidente Evo Morales, sin importar lo que digan ciertos analistas y periodistas de canales nacionales de nuestro país. Otros Analistas internacionales como Pedro Brieger, Francisco Coloane
[1] o el periódico mexicano La Jornada en un artículo de su corresponsal en Nueva York David Brooks
[2], entre otros han denunciado que esto fue un Golpe de Estados contra Evo Morales para lo cual el ejército Boliviano fue la punta de lanza de este golpe presionando y amenazando públicamente al Presidente a renunciar. No hay que olvidar que el ejército Boliviano esta infiltrado por la CIA norteamericana desde los años 60 por lo menos cuando el joven soldado y agente reclutado por ellos Félix Ismael Rodríguez capturo y asesino al Che Guevara y además varios militares de altos cargos de dicho ejército que están en actividad han sido formados y entrenados por la escuela de Las Américas. Falla de Evo Morales quien no tenía militares que le respondan cosa que si tiene Nicolás Maduro, una de las razones por la cual no pueden sacarlo del poder a pesar de que le liman las bases de su gobierno todos los días un poco más.
Estados Unidos hace del golpe de estado su Geopolítica la cual hemos definido en notas anteriores como la expansión o declive de un poder sobre otro en las dimensiones espacio-tiempo. En Argentina en la Provincia de Catamarca la empresa estadounidense Abemarle Corporation se quedó con los derechos exclusivos de exploración en el salar de Antofalla donde buscan litio. En la Provincia de Jujuy una comitiva norteamricana encabezada por Ivanka Trump, hija del Presidente Norteamericano visito la localidad de Purmamarca en septiembre de este año (2019) para acceder a la ruta del Litio con financiamiento para obras viales.
No contamos en Argentina hoy con un proyecto nacional con valor agregado de tecnología propia hasta ahora. Se intentó hacer en gobiernos anteriores pero no se ha avanzado. Hay experiencias, recurso humano, aisladas quizás, como el método ideado por un científico argentino para extraer litio sin contaminar, la tecnología del INVAP en Bariloche con la cual se podría avanzar en el desarrollo de baterías de litio o los libros coordinados en su investigación y edición por el especialista en Geopolitica, Sr. Bruno Fornillo: “Geopolitica del Litio” y “Litio en Sudamérica” que recientemente ofreció una charla en la ciudad de Bariloche organizada por la sede Andina de la UNRN.
Una vez que Bolivia elija al nuevo presidente anunciaran que van a rever la empresa estatal boliviana del litio y los acuerdos que el gobierno Boliviano firmo con el gobierno de
[3]China y el de Rusia de cooperación en julio de este año (2019) en varias áreas y una de ellas es la minería del litio y los hidrocarburos a través de Gazprom. Reverán los acuerdos con el objetivo de que estos proyectos cambien de manos o por lo menos entren empresas norteamericanas tal como intentaron hacer con las represas de Santa Cruz financiadas por China.
El consejero económico y comercial de China, Yao Ming, confesó que el desembarco de 50 empresas de ese país en Bolivia desde 2016 “es sólo el comienzo”. Además con la alternancia en el poder en Bolivia, Estados Unidos intentara recuperar otros espacios perdidos cuando Evo Morales había hechado a la USAID a la DEA y ONG norteamericanas del territorio que no eran mas que la continuidad encubierta de la política exterior norteamericana.
¿Y por Nicaragua cómo andamos? Antes de que Trump retomara en 2018 en la Asamblea de la ONU la Doctrina Monroe la Rusia de Putin y el gobierno de Daniel Ortega habían anunciadoa mediados de 2017 la finalización de las obras de la estación terrestre del Sistema Global de Navegación por Satélite (Glonass, acrónimo en ruso) ubicada al suroeste de Managua, la versión rusa del GPS estadounidense y el Galileo europeo, lo cual representa otra expansión en el “patio trasero de EEUU” de una potencia extranjera. La base está a cargo de la Agencia Federal Espacial de Rusia, también conocida como Roscosmos y servirá para recibir información satelital para enfrentar y anticiparse a los desastres naturales, lucha contra el narcotráfico, etc. Esa no es la única área de interés de Rusia en Nicaragua ya que también han avanzado en el desarrollo de proyectos hidroeléctricos conjuntos con los cuales controlan recursos hídricos. O sea en resumen estamos hablando de la expansión del poder ruso, de la Geopolitica rusa en espacio tiempo.
¿Pero quién gobierna en Nicaragua?
José Daniel Ortega Saavedra es el actual
Presidente de Nicaragua y líder del partido
Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Ejerció su primer mandato presidencial entre 1985 y 1990 para luego retomar la
presidencia del país el 10 de enero de 2007. Es el presidente que más tiempo ha permanecido en el cargo, ya que en la actualidad transcurre su tercer periodo el cual culminará en 2022, sumando así 15 años en tres mandatos desde su retorno al poder en 2007.
El Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) es un partido político de Nicaragua, fundado en su origen como una organización política-militar de izquierda en 1961 por Carlos Fonseca Amador, Santos López, Tomás Borge, Silvio Mayorga y Germán Pomares Ordóñez, entre otros.
Se conoce como Revolución Popular Sandinista o simplemente Revolución Sandinista, al proceso abierto en Nicaragua entre julio de 1979 hasta febrero del año 1990, protagonizado por el Frente Sandinista de Liberación Nacional, que puso fin a la dictadura de la familia Somoza, derrocando al tercero de los Somoza, Anastasio Somoza Debayle, sustituyéndola por un gobierno democrático de perfil progresista de izquierda.
Como todos los movimientos revolucionarios de América Latina el FSLN fue infiltrado por la CIA desde los comienzos y además la inteligencia norteamericana financio lo que se conoció como la “contra nicaragüense” quien se encargó de reclutar a ex integrantes de la dictadura de los Somoza (derrocados por el FLSN) y hasta hoy en día la infiltración de la CIA continua. La contra nicaragüense intento, y lo siguen haciendo hoy contra Daniel Ortega, acabar con el gobierno del FSLN. Basta con hacer una revisión de los diarios locales de Nicaragua para saber la verdad de los hechos y no los diarios internacionales como BBC o Agencia Reuters o la CNN que suelen hacer contrainteligencia. Verán que hay desde hace ya largo tiempo casi todos los días protestas sociales , ataques contra iglesias, propiedad pública, privada de ciertos movimientos golpistas de dudoso origen cuyo único objetivo es desgastar las bases del gobierno de Daniel Ortega para derrocarlo, cosa que podría ocurrir en poco tiempo.
Andres Vicente Nievas
Asesor del Bloque de Legisladores Juntos Somos Rio Negro
Viedma-Patagonia-Argentina
Foto: Agencia Telam