Buenos Aires, Argentina, 15 de agosto de 2025. En un mundo donde la salud se debate entre crisis globales y realidades locales, una poderosa alianza está en marcha. El movimiento de Municipios y Ciudades Saludables de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha llegado a la Patagonia, y está transformando la forma en que Argentina y, en particular, la provincia de Río Negro, abordan el bienestar de sus ciudadanos. .
Esta no es una simple iniciativa; es una revolución silenciosa que busca trascender la medicina reactiva para construir comunidades donde la salud se produce en cada rincón, desde las calles limpias y los espacios verdes, hasta las políticas de gobierno y la participación comunitaria. Es un compromiso holístico que reconoce que una ciudad no es saludable solo por tener buenos hospitales, sino por su capacidad de proteger y promover el bienestar de su gente a cada paso.
El impacto de este movimiento es innegable. A través de un enfoque que integra la salud en todas las políticas, el programa ha demostrado su capacidad para mejorar indicadores de bienestar, fomentar la equidad y fortalecer la resiliencia de las comunidades frente a los desafíos ambientales y sociales. La alianza entre los organismos internacionales, el gobierno nacional y las autoridades provinciales y locales ha creado una sinergia única.

Infografia: Líneas orientadoras para municipios y comunidades saludables
Esta colaboración permite que los principios globales de la OMS sean adaptados e implementados en el contexto particular de las ciudades argentinas, respondiendo a las necesidades específicas de cada región. El movimiento de Municipios Saludables en Río Negro es un ejemplo claro de cómo una visión global puede generar un impacto tangible y positivo en la vida de los ciudadanos a nivel local, demostrando que un futuro más saludable es un objetivo alcanzable a través de la cooperación y el compromiso.
La Misión Global: El Movimiento de Municipios Saludables de la OPS/OMS
El Movimiento de Municipios y Ciudades Saludables, impulsado por la OPS/OMS, es una filosofía de gobierno que tiene su origen en la década de 1980 en Europa y se ha expandido globalmente. Su premisa fundamental es que la salud no es solo un asunto del sector médico, sino el resultado de múltiples «determinantes sociales» que incluyen el entorno físico, las condiciones socioeconómicas, la educación y la seguridad.
Un municipio que se adhiere a este movimiento se compromete a poner la salud en el centro de todas sus decisiones políticas y a trabajar de forma intersectorial para crear entornos propicios para el bienestar. Esto implica desde la planificación urbana para promover el uso de la bicicleta y los espacios verdes, hasta la implementación de políticas que combatan la pobreza, promuevan la seguridad alimentaria y fomenten la inclusión social. En Argentina, el programa ha sido adoptado como una estrategia nacional clave para abordar la complejidad de los desafíos de salud pública de manera integral y sostenible, lejos de los enfoques fragmentados del pasado.

El Ministerio de Salud de la Nación maneja el programa
Argentina se Suma al Cambio: El Programa Nacional de Municipios y Comunidades Saludables
El Programa Nacional de Municipios y Comunidades Saludables de Argentina es la materialización de la visión de la OPS/OMS en el territorio nacional. El programa invita a las comunas a formar parte de una red colaborativa donde se intercambian experiencias, se desarrollan estrategias conjuntas y se fomenta la mejora continua en la gestión de la salud pública.
Para adherirse, los municipios deben cumplir con una serie de pasos formales, que incluyen la firma de un convenio de adhesión, la conformación de una Mesa de Trabajo Intersectorial y la elaboración de un diagnóstico de la situación de salud local. La adhesión a este programa no es una simple etiqueta; implica un compromiso real con la ejecución de proyectos concretos que atiendan las necesidades específicas de cada comunidad.
El gobierno nacional, a través del Ministerio de Salud, brinda apoyo técnico y herramientas para que las comunas puedan avanzar en la implementación de sus planes de acción, transformando así los principios teóricos en realidades tangibles para los ciudadanos.
Alcaldesas de la región de las Américas reflexionan sobre la importancia de que la salud sea central en la agenda de los gobiernos locales.
El Modelo de Río Negro: Un Compromiso con la Salud y el Bienestar Local
La provincia de Río Negro ha asumido el desafío del Movimiento de Municipios y Comunidades Saludables con un compromiso particular. La Secretaría de Salud de la provincia ha adaptado el programa nacional para responder a las realidades únicas de la Patagonia, que incluyen la dispersión demográfica, la diversidad de ecosistemas y los desafíos logísticos propios de la región. El programa provincial trabaja en estrecha colaboración con los municipios que adhieren, proporcionando asesoramiento técnico, capacitación y recursos para que puedan desarrollar sus propios planes estratégicos de salud.
Leer más: Neuquen: Municipios Saludables aprenden herramientas de autoevaluación
La creación de un Consejo de Municipio Saludable, como el recientemente conformado en Viedma, es un ejemplo concreto de cómo Río Negro está organizando sus esfuerzos para liderar con el ejemplo. Este consejo es el motor que coordina las políticas, moviliza los recursos y asegura que el compromiso con el bienestar de la población se traduzca en acciones concretas y medibles, desde campañas de concientización hasta la mejora de la infraestructura urbana.
Pilares del Éxito en la Patagonia: Un Enfoque Integral
El éxito del programa de Municipios y Comunidades Saludables en Río Negro se basa en un enfoque de tres pilares interconectados que aseguran que la salud sea una responsabilidad compartida y no exclusiva de un solo sector. El primer pilar es la Intersectorialidad, que implica la colaboración entre distintas áreas de gobierno, como salud, ambiente, desarrollo social, educación y obras públicas.
El segundo pilar es la Participación Comunitaria, un principio fundamental que garantiza que las decisiones se tomen con la voz de los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil. Esto permite que los proyectos se adapten mejor a las necesidades reales de cada barrio o comunidad. El tercer pilar es el Enfoque Holístico, que considera los determinantes sociales de la salud en su totalidad. Esto significa que el programa no solo se ocupa de la prevención de enfermedades, sino que también trabaja en la creación de entornos saludables, la reducción de la inequidad y el fomento de la calidad de vida en general.
Leer más: Roca participo del Programa de Municipios Saludables
Desafíos y Oportunidades: El Futuro del Programa en Río Negro
A pesar del compromiso y los avances, la implementación del programa en Río Negro no está exenta de desafíos. La sostenibilidad financiera es uno de los principales, ya que los proyectos de salud pública a largo plazo requieren de inversiones continuas que a menudo compiten con otras prioridades de gestión. La necesidad de una voluntad política sostenida es otro factor crucial; el éxito del programa depende de que las autoridades locales y provinciales mantengan su compromiso más allá de los ciclos electorales.
Sin embargo, estas dificultades no opacan las inmensas oportunidades que se presentan. El programa es una plataforma para fortalecer las capacidades de los gobiernos locales, mejorar los indicadores de salud, reducir la desigualdad y, en última instancia, construir una sociedad más fuerte y resiliente. El futuro del programa en Río Negro se ve prometedor, con cada municipio que se adhiere, se da un paso más hacia un futuro donde la salud es un derecho real y tangible para todos.
Andrés Nievas
Técnico en manejo ambiental, consultor Ambiental y escritor para medios locales e internacionales sobre temas de geopolitica y medio ambiente.