El 2 de agosto, la humanidad agotó su ‘presupuesto anual ecológico’. Se trata de la cantidad de recursos naturales que nuestro planeta puede reponer durante un año.
“Para el 2 de agosto de 2017, habremos usado más recursos naturales de los que nuestro planeta puede renovar en todo el año. Esto significa que en siete meses emitimos más carbono del que los bosques y océanos pueden absorber en todo un año. Atrapamos más peces, talamos más árboles, cosechamos más y consumimos más agua de lo que la Tierra pudo producir en ese mismo periodo”, indicó Global Footprint Network.
La organización ecologista Global Footprint Network calcula la fecha de lo que llaman el Día de la Sobrecapacidad de la Tierra desde 1986. En 2017, esa fecha cayó el 2 de agosto, seis días antes que el año pasado. Esto sugiere que para satisfacer el ‘consumo ecológico’ de la humanidad, hoy día se necesitarían 1,7 planetas como la Tierra.
En 1993, ese día fue el 21 de octubre, en 2003, el 22 de septiembre, y en 2015, el 13 de agosto. De seguir con esta tendencia, para 2020 se requerirán dos planetas para ‘saciar’ a la humanidad, y tres para 2050.
“En primer lugar, es necesario dejar de usar combustibles fósiles, ya que son la principal causa del cambio climático en la Tierra. Y aquí chocamos con un problema que no está relacionado con la tecnología o las finanzas. Se trata de una especie de egoísmo de diferentes países, porque cada país dice: vamos a esperar porque la transición a fuentes de energía alternativas cuesta dinero”, explica el director de campañas de Greenpeace en Rusia, Iván Blokov, citado por BFM.
No obstante, Global Footprint Network recalcó que, como aspecto positivo, el avance del Día de la Sobrecapacidad de la Tierra se ha ralentizado. El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) subraya que, pese al crecimiento de la economía mundial, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) relacionadas con la energía no aumentaron en 2016 por tercer año consecutivo. Esto se puede explicar en parte por el importante desarrollo de las energías renovables en la producción de electricidad.
En la década de 1960, la humanidad consumía solo dos tercios de los recursos que anualmente le ofrecía el planeta, y la mayoría de los países mantenían un saldo ecológico positivo. Para el año 2013, cada español consumía ya 2,4 veces más de lo que el planeta podía ofrecer a cada persona, los argentinos 2,2, los mexicanos 1,5 y los latinoamericanos como promedio un 1,6.