Ginóbili está envuelto en un conflicto que lleva ya casi 15 años a raíz de un reclamo que realizan los mapuches sobre tierras ancestrales en Villa La Angostura.

En una nota de revista Crítica, algunos líderes mapuches tuvieron fuertes dichos contra el basquetbolista por querer meterse en un negocio inmobiliario que incrementaría aún más las tensiones en la zona.

Villa La Angostura se fundó luego de la dictadura cívico militar en los años 70, y el municipio fue avanzado sobre tierra mapuche que había sido cedida incluso por Julio Argentino Roca después de su «campaña del desierto».

Actualmente, los mapuches ocupan 125 de las 625 originales, y están en pos de guerra contra este negocio el fideicomiso Lago Correntoso (asociación compuesta por empresarios ligados al Gobierno Nacional, dirigentes de Boca Juniors, partidos políticos) junto al Terrazas del Correntoso (proyecto inmobiliario del basquetbolista Emanuel Ginóbili), según destacan en la publicación.

Un camino de mil metros fue abierto «destruyendo la biodiversidad, las plantas medicinales; además del impacto ambiental, existe un fuerte impacto cultural», explicó Andrés Fuentes, kona de la comunidad Lof Paicil Antriao.

En la misma nota, Jorge Nahuel, titular de la Confederación Mapuche de Neuquén, sostiene que el conflicto en Paicil Antriao es una «usurpación por parte del fideicomiso Lago Correntoso, pero el primer usurpador es Ginóbili, pues fue quien inició este avance sobre las tierras comunitarias».

Y avanza sobre la figura del deporte: «Ginóbili está en la misma calidad que ese consorcio de empresas, y nosotros lo calificamos como usurpadores de tierras comunitarias, y exigimos su retiro de esa tierra. No vamos a permitir que Ginóbili ponga un solo pie en esa tierra que compró a través de métodos fraudulentos», aseguró.

Hace pocos días, desde la comunidad denunciaron el ingreso de un grupo de matones por la madrugada, quienes portaban -según los denunciantes- armas de fuego y palos, para destruir una barricada que habían preparado en el ingreso a estas tierras.

«La mayoría de los compradores son extranjeros, y las inmobiliarias les venden y -obviamente- no les dicen que es territorio de la comunidad. O les venden más barato porque ‘van a tener problemas con los mapuche’. Así les dicen», relata Andrés.

En la nota pone en duda la honestidad de la compra por parte de Ginóbili, quien habría adquirido las tierras comprándoselas al intendente municipal durante la Dictadura, José Salamida, al irrisorio valor de 150 mil dólares. «Una ridiculez», marcó el mapuche.